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Colau acepta una comisión extraordinaria para investigar los sueldos de TMB

Imagen de archivo de las oficinas de Transports Metropolitans de Barcelona

Yeray S. Iborra

Tras la presión de la oposición, no habrá una comisión extraordinaria para investigar la gestión de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), sino dos. El Gobierno de Barcelona ha anunciado que se llevarán a debate los sueldos de TMB en sendas comisiones extraordinarias: primero en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y después en el consistorio, en una comisión municipal extraordinaria de Ecología, Urbanismo y Movilidad. Por el momento no hay fechas para las sesiones.

El Ejecutivo de Ada Colau ha destacado a este medio “la voluntad política” a la hora de convocar las comisiones, más allá de la insistencia de la oposición este lunes. “Sumara o no sumara la oposición, estas comisiones se llevarán a cabo por iniciativa del Gobierno”, han destacado fuentes municipales.

El grueso de la oposición había movido ficha a principios de semana en torno a la opacidad “absoluta” –destacaba el líder de ERC, Alfred Bosch– de TMB. En procesos administrativos paralelos, Esquerra y Ciutadans habían pedido una comisión extraordinaria, iniciativa a la que se sumó la CUP, que hace meses que critica la gestión de TMB.

A última hora de la tarde del lunes, incluso el PSC –socio de Gobierno de Colau– mostró su apoyo a una eventual comisión extraordinaria y criticó los reiterados incumplimientos de la ley de Transparencia por parte de la empresa de transporte pública. “La Ley de Transparencia está para cumplirla en todos los ámbitos de la administración pública”, citó la regidora socialista Carmen Andrés.

Si bien Colau ha aceptado la comisión extraordinaria para debatir en torno a la gestión de TMB, el consistorio no se ha pronunciado sobre otra de las propuestas surgidas este lunes: ERC planteaba también una auditoria externa de TMB.

La petición de la comisión de investigación también ha servido a los diferentes grupos para cargar contra Colau en las últimas horas. El último de los grupos en sumarse a las críticas ha sido el Demócrata (antigua CiU), que ha recordado la bajada de sueldos que el partido convergente realizó en su entrada al gobierno en el año 2011. “Con nuestra entrada en el gobierno municipal se revirtió la situación económica de la empresa y se garantizó su futuro”, destacó el regidor Joaquím Forn.

En la misma línea se pronunció unas horas después la regidora de Movilidad, Mercedes Vidal, tachando de “desorbitados” los sueldos de los ex directivos y defendiendo las reducciones en el actual mandato.

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