El cooperativismo catalán muestra en Europa la riqueza del turismo que liga acción social, tierra y cultura
Las cooperativas catalanas incluidas en el proyecto europeo Cooproute han presentado en Bruselas su opción como punto de interés europeo. Cataluña es el territorio más representando dentro de la UE en este programa. Concretamente, siete cooperativas catalanas, miembros de la Federació de Cooperatives de Treball de Catalunya (FCTC) de las 10 seleccionadas forman parte de la primera ruta europea del cooperativismo que oficialmente se puso en marcha a principios de este año habilitando una página web donde los viajeros pueden encontrar destinos de acuerdo con los principios de respeto al medio ambiente, cultura y sostenibilidad social.
En la capital europea la delegación catalana, que se desplazó el 24 de febrero pasado, estaba formada por la banda cooperativista por Carles de Ahumada, director de l'Olivera, una cooperativa de iniciativa social que tiene como elemento central una bodega productora de vinos de calidad, pero que también hace tiempo que dedica un espacio a acoger visitas turísticas y además recibe viajeros interesados en el maridaje de tierra, trabajo social y arraigo. Lo hace en su sede, en Vallbona de les Monges, uno de los lugares con mayor potencial turístico del interior catalán.
Por el lado oficial estuvieron presentes, Xavier López, director general de Economía Social y Cooperativa y Trabajo Autónomo y el delegado de la Generalitat en Bruselas, Amadeu Altafaj.
Las cooperativas de trabajo, que forman parte del proyecto Cooproute son Sambucus, Biciclot, L'Olivera Cooperativa, La Ciutat Invisible, Els Caus de Mura, la Garbiana, a los que se suma la agencia de desarrollo rural del Berguedà en representación de las cooperativas de la comarca, junto con las cooperativas agrarias como Agrícola Falset-Marçà, Adernats Vinícola de Nulles y Apícola el Perelló. Además de Cataluña al proyecto están presentes entidades de las organizaciones socias del proyecto y que integran los países siguientes: Alemania, Bulgaria, Dinamarca, España, Estonia, Francia, Irlanda, Italia, Portugal y Reino Unido.
Carles de Ahumada expuso en la reunión europea la experiencia del L'Olivera, en su triple vertiente. Por un lado es una entidad que produce vinos de alta calidad. De la otra es una cooperativa de inserción social y también es una entidad de trabajo asociado. Los últimos años han conseguido que la visita a su sede en Vallbona de les Monges forme parte de las rutas de un turismo respetuoso con el medio y ávido de conocer lugares de Cataluña fuera de los grandes circuitos.
Por su parte, Xavier López valora el encuentro en las oficinas de la Unión Europea como «una gran oportunidad para el país, ya que puede añadir el cooperativismo agrario, las bodegas cooperativas y su arquitectura espectacular con la forma de hacer de los cooperativistas, que pueden crear una corriente de singularidad que puede incorporar muchos lugares del interior de Cataluña a las rutas turísticas más habituales ».
Incluso en Barcelona, cooperativas como Biciclot y la Ciutat Invisible ya están preparadas para recibir a los primeros participantes en las rutas. «Nosotros tenemos bastante experiencia en organizar actividades en forma de ruta que nos permiten mostrar aspectos de Barcelona poco conocidos por los turistas, ya veces por la gente de aquí», explica un miembro de la Ciutat Invisible.
Las personas participantes en la conferencia expresaron la razón por la que las cooperativas son un modelo inspirador para ofrecer una experiencia turística sostenible en la difusión de los valores cooperativos de autoayuda, autorresponsabilidad, democracia, igualdad, y solidaridad.
