El día en que miles de farmacias de toda Cataluña han bajado sus persianas en señal de protesta contra los impagos, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que se empezarán a poner al día los pagos a partir de la próxima semana. Será directamente el Estado quien abone las facturas pendientes de la Generalitat a las farmacias, como lo hará con otras empresas, en el marco del plan de proveedores.
Este era principalmente el objetivo de la huelga que han secundado la mayoría de las 3.100 farmacias que hay en Cataluña, que esperan que mañana el Consejo de Ministros apruebe el pago de los 416 millones de euros que se les adeuda, lo que supone tres de las cuatro mensualidades que se les debe desde el Servicio Catalán de la Salud. Esta es la segunda vez que las farmacias catalanas cierran en pleno, después de la parada del pasado 12 de octubre.
En este contexto de impagos, ya hace tiempo que las farmacias denuncian que viven una situación “insostenible”, en palabras de Jordi de Dalmases, presidente del Colegio de Farmacéuticos, y se quejan de que se les trata de “moneda de cambio” en un conflicto político. Por ello, este jueves se manifiestan ante la Delegación del Gobierno en Cataluña.
“Todos tranquilos que pagaremos lo que hay pendiente”, expresó esta mañana el ministro Montoro, en una cumbre contra la morosidad organizada por la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad. No ha dicho exactamente cuándo se harán efectivos los pagos, pero sí ha prometido que sería “muy pronto”.
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