El drama de los desahucios entra en campaña
Todas las campañas sufren alteraciones que obligan a los partidos políticos a salirse de los guiones que han sido preparados meticulosamente para seducir al mayor número posible de electores. A pesar de que los políticos se sienten mucho más cómodos desarrollando los discursos que llevan preparados, la actualidad es tozuda. Y, en este caso, dramática. El suicidio de una mujer de 53 años en Baracaldo, que se tiró por la ventana mientras la comitiva judicial entraba en su inmueble, ha sacudido la campaña. El piso, propiedad de La Caixa, ya estaba a la venta desde hace un año, según informó Eitb, la radio televisión vasca, y se ofrecía por 233.180 euros. No es el primer suicidio que provoca un desahucio por no pagar la hipoteca.
El drama llegó un día después de que una abogada de la Unión Europea elevara al Tribunal de Justicia un informe que advertía que la legislación española de desahucios contradice la ley europea de derechos del consumidor. Con todos estos hechos, fue imposible que los políticos catalanes evadieran la actualidad. Los partidos que más alzaron la voz, son los que desde hace tiempo denuncian esta práctica de los bancos y cajas, como ICV-EUiA. Su candidato, Joan Herrera, aprovechó para pedir a CiU que no se limite a recordar que es una competencia estatal y reclamó que “ni Rajoy ni Mas pongan Mossos o policías para desahuciar a la gente”. El candidato ecosocialista añadió: “¿Mas no dice que en situaciones extraordinarias hay que dar respuestas extraordinarias? Pues den respuestas extraordinarias a unas personas que están siendo desahuciadas por una ley sin alma y sin escrúpulos”.
Alfons López Tena, de Solidaritat Catalana per la Independencia, que llevó al Parlament la propuesta de la dación en pago, ya había denunciado en varias ocasiones que la Generalitat no tuviera “capacidad de decisión” sobre un tema tan importante.
El candidato socialista, Pere Navarro, también reclamó a Artur Mas y Mariano Rajoy que “colaboren con el objetivo de parar estos desahucios, que son un problema grave en la sociedad catalana y española”. El Ayuntamiento de Terrassa, liderado por Navarro, se ha implicado en varias ocasiones para buscar salidas a vecinos que han sufrido desahucios. Aún así, Navarro no puede hablar sobre de los desahucios con la misma tranquilidad como lo pueden hacer los candidatos de ICV-EuiA o Solidaritat, ya que el día 6 de marzo el PSOE se abstuvo y no apoyó una moción presentada por Izquierda Plural en el Congreso de los Diputados para regular la dación en pago. Sí que votaron a favor CiU, PNV, ERC y Grupo Mixto. El PP votó en contra.
Preguntado sobre este tema, el candidato de CiU, Artur Mas, recordó que el Parlament ya aprobó una declaración “hace meses” en la que reclamaba al Congreso que aprobara la dación en pago. Quien ayer intentó evitar el primer bache de la campaña con todo su interés fue Alicia Sánchez-Camacho. Además se da la circunstancia de que la candidata popular visitó el mismo viernes el barrio de Ca N’Anglada, en Terrassa, donde desde hace tiempo se producen casos dramáticos por culpa de los desahucios. Sánchez-Camacho se limitó a hablar de “seguridad” en Ca N’Anglada y a reclamar “civismo” y un mayor “control de la inmigración”.
Por la tarde, en el mitin con Mariano Rajoy en Lleida, Sánchez-Camacho utilizó la estrategia que tanto critica de Artur Mas de tapar los problemas con la bandera y, en vez de hablar de los desahucios, le tiró en cara al PSC que el día 12 de octubre no hubiera asistido a la concentración españolista que se convocó en plaça Catalunya.
