La Generalitat asegura ahora que se garantizarán los 540 maestros prometidos para atender la diversidad
La consellera de Enseñanza de la Generalitat catalana, Meritxell Ruiz, anunciará este jueves a los directores de escuelas públicas que al final sí que podran contar con las 540 dotaciones de personal adicionales para atender la diversidad en las aulas. Después de una semana de conversaciones con la conselleria de Economía -y de protestas a las puertas de las escuelas y del Parlamento-, Ruiz ha explicado a TV3 que han conseguido parte de los 211 millones que preveían los presupuestos fallidos de 2016 para reforzar el modelo de escuela inclusiva y los centros de entornos empobrecidos (los llamados de “alta complejidad”).
El pasado 13 de junio los directores escuchaban por boca de Enseñanza que no podrían contar con las 140 dotaciones de personal prometidas para reforzar la inclusión de los alumnos con discapacidad y las 400 dotaciones para los centros de alta complejidad. También se les informaba de que pendía de un hilo la renovación de 350 técnicos que en el actual curso ya habían sido contratados para apuntalar el modelo de escuela inclusiva. El argumento de la consejera Meritxell Ruiz era que la prórroga de los presupuestos de 2015 impedía ampliar en 211 millones de euros las partidas. Una semana después, el lunes 20, las entidades de la comunidad educativa presionaban desde el Parlament de Catalunya para que el Gobierno buscara la fórmula para conseguir el dinero. Esa misma noche Ruiz explicaba a los medios de comunicación que las negociaciones mantenidas con el departamento de Economía ya habían garantizado, por la vía de una modificación de crédito, el dinero para renovar el contrato de los 350 técnicos de educación infantil, de integración social y de las Unidades de Apoyo a la Educación Especial (USEE). Finalmente, a día 23 de junio, la consejera se reúne nuevamente con los directores para informarles de que también se garantizarán para el próximo curso las 540 dotaciones inicialmente prometidas, cuya financiación se obtendrá de partidas desviadas de otras consejerías.
Esta secuencia ha caldeado un fin de curso escolar que se esperaba mucho más tranquilo. Los sindicatos han encabezado unas protestas que, según ellos, han dado sus frutos. “Se ha demostrado que las movilizaciones hacen que las cosas que eran imposibles ahora sean posibles”, expresa el portavoz del sindicato USTEC, Ramon Font, que aun así tacha “insuficiente” el giro de Enseñanza, porque todavía hay medidas que estaban incluídas dentro de los 211 millones que no se garantizarán. Se trata sobre todo de permitir avanzar las sustituciones, también en el caso de los interinos que se contratan en septiembre, y que una vez más entrarán a trabajar coincidiendo con el inicio de las clases y no a principios de septiembre. “Esta cobertura equivale sólo a 4 millones”, se queja Font.
La consejera, sin embargo, reiteró en sus declaraciones en TV3 que “no hay” dinero para mejorar las sustituciones. Ruiz tampoco ha aclarado de qué consejerías se sacará el dinero que servirá para cumplir con sus compromisos. “Hemos extraído recursos de otras partidas para priorizar las políticas sociales”, se ha limitado a afirmar. Y ha recordado, además, que en septiembre habrá nuevos maestros -unos 780- para hacer frente al crecimiento en número de alumnos, un incremento del profesorado que en este caso nunca peligró.
