El 'profesor' Junqueras vuelve a las aulas: “Para Esquilo, la justicia verdadera es la que nace de un pacto en la comunidad”

Oriol Junqueras, líder de ERC y preso en la cárcel de Lledoners, ha vuelto este martes a impartir clases en la Universidad de Vic por videoconferencia, después de varias semanas de estricto confinamiento que le habían impedido comunicarse con sus alumnos. En la sesión con la que ha retomado las clases, el profesor del campus Manresa de la Universitat de Vic-Universitat Central de Catalunya (UVic-UCC) ha hablado sobre qué es la cultura clásica, deteniéndose en qué obras se consideran parte de esa tradición y qué valores promueve en dos campos que conoce bien: el político y de la justicia. 

Sobre el mundo del derecho, Junqueras ha afirmado que para el dramaturgo griego Esquilo “la única justicia verdadera es la que nace de un pacto entre una comunidad de personas libres” porque lo contrario son “actos de justicia individual que siempre acaban teniendo un punto de injusticia. El político encarcelado ha citado al autor griego para asegurar que, en su visión, la democracia ateniense nacía como la necesidad de velar por el bien común, un valor que para Junqueras sigue seduciéndonos 25 siglos después.

Según la lección impartida por el líder independentista, la cultura propia de cada civilización tiene que ver con la pregunta fundamental que esta se hace, que es implícita. A su entender, por ejemplo, los pueblos de pastores que vivían en Oriente Próximo mirasen al cielo y se preguntasen “quién” había realizado la creación, dando como respuesta un Dios. Mientras, ha afirmado, la cultura griega se preguntaba por “cómo” se había creado, reflexionando para ello sobre la diversidad y la política.

“¿Qué consideramos clásicos literarios, teatrales o filosóficos?”, se ha preguntado Junqueras ante una audiencia con varias decenas de estudiantes. “Las obras que transmiten valores y referencias que pueden ser entendidas por una persona en Grecia, Europa o la otra punta del mundo, que puede ser comprendida por una cultura que comparte esos valores y por una que no los comparte, y que también puede ser entendida por cualquier generación”, ha afirmado el político, que es experto en pensamiento económico y también ha impartido clases sobre historia japonesa y de Asia Oriental.

“Si un autor habla de un evento actual y concreto, los futuros lectores perderá la referencia”, ha continuado el jefe de ERC. “Pero si habla de las emociones humanas, del amor o del miedo, los lectores de aquella obra siempre se sentirán interpelados, porque todos los lectores o los espectadores han sentido alguna vez el miedo o el amor”, ha afirmado el profesor.

Una respuesta ante “dudas” como la epidemia

Las obras clásicas, es decir, las que apelan a sentimientos y problemas que son comunes a todos los humanos en todas las épocas, son especialmente valiosas en “etapas de dudas”, como puede ser la actual pandemia por COVID-19. Según ha afirmado, estos libros ofrecen “guías, referentes y herramientas” sobre las experiencias que ha tenido la humanidad en otros momentos de la historia y que se pueden aplicar en la actualidad ante “situaciones difíciles, desde la perspectiva política, económica o epidemiológica”.

Junqueras además ha repasado varios títulos producidos durante épocas de pandemia o cataclismo, como el Decamerón de Boccaccio, el Frankenstein de Mary Shelley, o las pinturas con soles difuminados de Turner. Unas obras realizadas en épocas de penumbra para el ser humano y que, sin embargo, reflejan unas ideas universales. “Son unos valores que tienden a conformar nuestra alma y acostumbran a ser una buena guía cuando el mundo cambia, cuando vivimos etapas de duda”, ha asegurado.

La intervención del exvicepresident de la Generalitat ha sido seguida por muchos estudiantes pero también por periodistas y curiosos que han accedido a la sala virtual donde se celebrara la clase. Sin embargo, antes de dar la palabra al ponente, la moderadora ha advertido de que solo se admitirían preguntas relacionadas con la materia. Sin poder responder a todas las que le han llegado, el profesor encarcelado ha invitado a sus alumnos a buscar obras clásicas en Internet. “En el lugar donde yo vivo no existe eso de Internet”, ha ironizado, en referencia a la restricciones de comunicación que existen en la prisión de Lledoners.