El ERE extintivo de Elcogas se negocia sin más noticias del Ministerio de Industria

En agosto, el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, aseguró ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados que el Ministerio tenía un plan para apoyar Elcogas. La cifra que se invertiría en la central era de unos veinte millones de euros. Los sindicatos UGT y CCOO se reunieron con Nadal a principios de septiembre, y aseguraron que la secretaría de Energía se comprometía a ayudar a la central con 27 millones de euros anuales, durante cinco años. Las organizaciones celebraron el anuncio, calificándolo como una “nueva puerta” para pelear por la viabilidad de la planta y la industria de la comarca de Puertollano. José Manuel Soria, Ministro de Industria, indicó finalmente a Emiliano García-Page que las ayudas serían de “entre 15 o 20 millones de euros”, sólo si la Junta de Comunidades se comprometía a aportar una partida similar.

Pero dichos anuncios se han quedado en eso, anuncios, y los trabajadores y la empresa se preparan desde hoy para iniciar una serie de negociaciones que se saldarán con el Expediente de Regulación de Empleo extintivo de la central, ubicada en la localidad ciudadrealeña de Puertollano. El comité de empresa pidió la semana pasada una reunión “tripartita”, en la que incluían al Ministerio de Industria e, incluso a la Junta de Comunidades, pero las negociaciones serán finalmente sólo entre ambas partes. José Antonio Alcaide, presidente del comité de empresa, ha asegurado que no han recibido ninguna información del Ministerio de Industria. Elcogas señala que el último anuncio que recibieron fue la autorización de cierre. 

El procedimiento de este ERE es el normal: la empresa entregará la memoria de datos en la que se refleja su situación económica para justificar la decisión de cerrar la planta, a la que sólo podrán acceder los trabajadores en la reunión de mañana, según lo regula la ley. Los trabajadores señalan que están a expensas de lo que quiera proponer la oferta, y que tendrán que ajustarse a lo que afecta a las empresas principales de Elcogas. “No podemos ofertar ni ofrecer nada todavía, porque necesitamos saber qué es lo que pasa con la planta”, señala Alcaide. Son 143 los trabajadores que se quedarán sin trabajo, si no hay reacción de Industria hasta el 31 de octubre, día en el que está previsto el cierre definitivo de la planta. Los trabajadores siguen pidiendo la reunión con Industria, aunque el Ministerio “se niegue a convocarla”.

Por parte de Elcogas, la versión es similar a la de los trabajadores. Aunque recalcan que su voluntad es “el dialogo y el acuerdo”, la empresa señala que no tiene más remedio que alcanzar un acuerdo antes del 31 de octubre, por lo que se deben empezar “desde ya” con las negociaciones. Al ser un ERE extintivo, la empresa asegura que no tiene más tiempo y que debe cumplir los plazos. Elcogas no descarta que llegue una propuesta que pueda cambiar el rumbo de la central de aquí a finales de octubre, pero por ahora, argumenta que deben comenzar con las negociaciones para poder llegar a un acuerdo con los trabajadores. “Hemos pedido un régimen retributivo para que se vea la particularidad de Elcogas”, afirman fuentes de la empresa que asegura que la última noticia que han tenido de la cartera de Soria es la autorización de cierre. 

El PSOE presentó una enmienda en el Congreso de los Diputados para pedir un régimen retributivo específico para Elcogas en los Presupuestos Generales del Estado. La Junta aseguró promover esta medida entre los socialistas a nivel nacional,en la que se proponía incluir a la empresa en el régimen al considerarlo como una instalación “singular de producción de energía eléctrica”, que podían incluirse en la actividad de producción de energía eléctrica a partir de energía renovable, cogeneración y residuos, regulado por el Real Decreto 412/2014. De hecho, el socialista Sergio Gutiérrez aseguró que el Comisario Europeo de de Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, ha señalado que Elcogas está en “consonancia con una política energía resistente” y que había anunciado también la apliación de fondos a proyectos “ como el de esta compañía”.

Por su parte, el Ministerio de Industria aseguró, tras su reunión con Emiliano García-Page, que, efectivamente, el Gobierno de España tenía como objetivo “prioritario” que la planta se mantuviese funcionando, debido a su tecnología de ciclo combinado que gasifica el carbón a través de una “tecnología limpia” que genera mucha menos emisiones de CO2. Esto, señaló la cartera, contribuye a a los objetivos planteados para el año 2020 de disminución de emisiones. Sin embargo, Industria también puntualizó que se trata de una instalación “deficitaria” y que, por tanto, el déficit lo asumen “directamente en la luz todos los consumidores españoles”.