PSOE y Podemos pactan nuevos presupuestos con 629 millones para emergencia social
La semana decisiva para el despegue de los Presupuestos de Castilla-La Mancha de 2016 ha comenzado con la puesta en escena del acuerdo inicial alcanzando entre PSOE, que gobierna en la comunidad autónoma, y Podemos, que apoyó la investidura de Emiliano García-Page, sobre el anteproyecto de ley. Ahora las cuentas recibirán el visto bueno del Consejo de Gobierno y pasarán posteriormente a su tramitación en las Cortes regionales, donde podrán ser enmendadas. El acuerdo con la formación morada anticipa que no habrá enmienda a la totalidad de este partido, por lo que solo cabe la del PP. Sí que habrá enmiendas parciales, pactadas o no, entre socialistas y Podemos.
En total Castilla-La Mancha dispondrá en este año de 8.420 millones de euros, 215 millones de euros más que en los últimos presupuestos, aprobados por el Gobierno anterior de María Dolores de Cospedal. El incremento, según ha adelantado el vicepresidente, José Luis Martínez Guijarro, es del 2,6% respecto a 2015, con un 70% del gasto no financiero destinado a políticas sociales.
De entrada, los Presupuestos regionales de 2016, que no se harán públicos hasta el miércoles, se encuentran en la “pista de despegue” con cuatro pilares básicos, el primero de ellos referido a las políticas de emergencia ciudadana. En total se destinarán a estas medidas 629 millones de euros, por encima de los 500 millones a los que se comprometió García-Page durante su investidura, y una de las 'líneas rojas' marcadas por Podemos para darle su apoyo. Como complemento a estas ayudas, en las medidas del texto articulado en paralelo a las cuentas autonómicas, también se incorpora la simplificación de los procedimientos administrativos para ayudas sociales.
Los otros tres pilares están relacionados con la recuperación de los servicios públicos y con el impulso al empleo. Tal y como adelantó en su momento el presidente castellano-manchego, el objetivo es ofertar unas 6.600 plazas de empleo público para toda la legislatura. Concretamente, para este año, serán 1.042 para el sector sanitario, 404 para educación, 120 para empleo y 189 plazas de recuperación de funcionarios en la Administración general.
Novedades en sanidad y educación
Novedades importantes presentan los Presupuestos en cuanto a la sanidad. En total, se reduce un 7,8% el presupuesto para servicios sanitarios concertados con respecto a 2014, bajo un compromiso de ir reduciendo estas prestaciones y solo realizar derivaciones de pacientes de la sanidad pública hacia la privada cuando los centros de titularidad regional estén a pleno rendimiento. En el acuerdo con Podemos, la Junta también se compromete a remitir cada tres meses al Parlamento regional información sobre todas las derivaciones.
En cuanto a la educación, el compromiso es similar: bajar progresivamente la financiación pública a educación concertada. De momento, se han congelado las partidas de 2015 destinadas a centros concertados y el objetivo es reducir paulatinamente las ratios hasta alcanzar los 25 alumnos por aula en Educación Infantil, 25 en Primaria, 30 en Educación Secundaria y 32 en Bachillerato al final de la legislatura.
A la espera de que las cuentas se hagan públicas, el acto de hoy ha servido para que los firmantes del acuerdo hayan valorado este pacto, que se ha llevado a cabo después de negociaciones de varias semanas entre PSOE y Podemos. García-Page ha comenzado afirmando que tras el “retraso” del borrador, “ha merecido la pena”, recordando que Cospedal tardó prácticamente un año y medio en sacar sus primeros Presupuestos “liquidando entre tanto miles de puestos de trabajo”. Ha agradecido a la formación morada su “planteamiento por el cambio” y ha reconocido que no es el presupuesto que hubiera hecho el PSOE si dispusiera de mayoría absoluta, pero que la formación morada ha cumplido una función “aceleradora” del mismo.
Acuerdo “franco y sincero”
“Hemos cerrado un acuerdo franco y sincero, con posiciones diferentes pero no tan alejados. Nuestro objetivo ha sido, antes que recuperar, parar la hemorragia producida por Cospedal”, ha afirmado el presidente, convencido de que las cuentas son las primeras de “recuperación social y económica” de la región. “Servirán para que haya más riqueza y empleo, y para que se reparta mejor el empleo y la riqueza, como las dos caras de la misma moneda”. Según ha destacado, el nuevo presupuesto “manda al olvido” la política del Gobierno anterior del PP, e incluso ha confiado en que sea “imitable en el resto de España”. Así, ha afirmado que el acuerdo es un “buen ejemplo” en España de que se pueden “cambiar las cosas de raíz sin romper nada, un ejemplo de Gobierno posibilista pero al mismo tiempo inconformista”.
Por su parte, el líder regional de Podemos, José García Molina ha comenzado defendiendo el pacto con los socialistas porque garantiza la máxima de que “el dinero público debe servir para el desarrollo de la región”. “Hoy sentamos las bases de un gran acuerdo para la recuperación de aquellos que peor lo han pasado”, ha afirmado, al tiempo que ha querido trasladar una petición realizada en este pacto, como la referida a la subvención pública de prácticas religiosas en atención sanitaria, y que se realizan tan solo bajo el credo del catolicismo y no de otras creencias.
“No entendemos un gasto de medio millón de euros en la financiación pública de servicios religiosos en sanidad. No estamos en contra de que los obtengan, sino que no sabemos por qué se paga a una sola confesión religiosa con el dinero público de todos”. Por ello ha hablado de un acuerdo para instar al Gobierno central a que vaya modificando esas prácticas. Y al tratarse de una competencia estatal, también Page han mostrado su disposición a que se abra un debate en este sentido. En concreto, han adquirido el compromiso de instar al Gobierno central a suspender el Concordato con el Vaticano que obliga a financiar con dinero público los servicios religiosos católicos en la sanidad pública.
Finalmentes, ambos han sido muy prudentes a la hora de valorar si este pacto podría servir de estímulo a las negociaciones que se llevan a cabo para el futuro Gobierno central. Page ha dicho que de este pacto puede sacarse “una buena aportación” a la política nacional pero han coincidido en que los escenarios son muy diferentes y que será necesario seguir negociando para que pueda “despejarse el escenario”.
