Podemos avisa a la Junta que “se la juega” con el amianto como con las tierras raras

La polémica por los vertidos de amianto en el barrio del Polígono de Toledo ha llegado a las Cortes de Castilla-La Mancha mediante un debate general propuesto por el Grupo Parlamentario de Podemos. Durante el mismo, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha realizado una cronología de los hechos reafirmando que el Gobierno regional “tomó cartas en el asunto” desde junio del año pasado. No ha compartido esta postura el diputado de la formación morada David Llorente, quien además ha avisado de que la Junta “se la está jugando” con esta cuestión como con el proyecto de tierras raras.

Durante su primera intervención, el consejero ha realizado un repaso por las principales acciones llevadas a cabo desde que la empresa Ibertubo de Toledo, responsable de los restos de fibra de amianto, quebró en 2002. Ha detallado que, frente a la inacción del Gobierno anterior del PP, el Ejecutivo de Emiliano García-Page abordó este problema en junio y julio del año pasado realizando mediciones de aire para determinar si existía o no riesgo ambiental o para la salud. Entonces, los resultados obtenidos fueron de 0,00077 fibras por centímetro cúbico, muy por debajo del 0,1 determinado como límite en entorno laboral.

También ha referido las reuniones entre la Consejería de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Toledo, así como las nuevas mediciones que se hicieron en diciembre en las mismas zonas del mes de junio, no habiendo presencia de amianto en suelo pero sí en el aire: 0,00017 fibras por centímetro cúbico en la finca de El Olivar; 0,00067 en el Club de El Mirador y 0,000815 en parcela particular. En este caso, también “muy, muy lejos” de un problema ambiental o de salud por contaminación del aire. Se trata, ha resaltado, de niveles “mil veces inferiores” a los que establece la normativa como potencialmente dañinos para la exposición en ámbitos laborales.

Entre las últimas acciones, Martínez Arroyo ha precisado que estas mediciones se remitieron a la Fiscalía y al Ayuntamiento, y que además el pasado 20 de abril los agentes medioambientales también detectaron presencia de vertidos en el Barrio Avanzado. Además ha resaltado la reunión de la comisión técnica creada en el Ayuntamiento con la Junta, plataformas vecinales, y la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) para buscar soluciones de vallado y señalización de zonas afectadas. Igualmente, ha hecho referencia a un estudio de la Consejería de Sanidad sobre la mortalidad causada por mesotelioma, asociada a la exposición al amianto. Según ha dicho, el porcentaje en la provincia y en el término municipal de Toledo es más bajo que a nivel regional y nacional, por lo que “no hay problema de carácter sanitario ni de salud pública”.

La réplica se la ha dado el diputado David Llorente reprochando al Gobierno regional que no haya tomado medidas para “un verdadero desastre ecológico y de salud pública” para decenas de miles de personas. Ha querido hacer hincapié en el hecho de que hasta 8.000 hectómetros cúbicos de amianto, sin contar los lodos del subsuelo, se encuentren a tan solo 300 metros de las casas del barrio del Polígono toledano, alertando de que la acción de los vientos y de los animales aumentan el peligro. Además ha afirmado que los niveles mínimos apuntados por el consejero se refieren a entornos laborales seguros, “no en suspensión en el aire”.  

Llorente ha apuntado de hecho que, según algunos expertos, no se cumplen los niveles mínimos de seguridad, que los vertidos son también un “delito ecológico” y que con su “inacción” la Junta incumple la normativa sobre vertidos de residuos y la Confederación Hidrográfica del Tajo (ÇCHT), aunque ha anunciado que retirará los vertidos, el reglamento sobre dominio público hidráulico. En general, ha acusado a la Junta de una “doble estrategia de la negación”, por negar la gravedad del problema y también sus competencias al respecto.

Comisión técnica y Barrio Avanzado

Finalmente, se ha referido a la comisión técnica del Ayuntamiento para pedir que se publiquen todos los informes y se fijen plazos concretos, al tiempo que ha pedido explicaciones sobre los restos de amianto en la parcela del Barrio Avanzado. En este último punto, ha preguntado cómo es posible que hubiera informe ambiental favorable y ha comparado la situación con la del proyecto de tierras raras en el Campo de Montiel. “Se la está jugando como lo está haciendo con la minería”, ha avisado.

Sobre el Barrio Avanzado ha incidido también la diputada del PP Claudia Alonso, que ha decidido denunciar repetidamente la “incompetencia lateral” de la Junta, que “todo lo que gestiona, se agrava y se dilata en el tiempo”. Ha acusado a la Administración regional de tirar 600.000 euros “para una caseta”, con informes donde “no se vieron toneladas de amianto” y “queriendo construir 2.000 viviendas sobre un vertedero”. “Basta de reírse de los toledanos y asuman sus responsabilidades y den la cara. Lo que no han hecho en 14 años”, ha concluido.

En su intervención final, el consejero ha pedido “no alarmar” a la población. Ha reconocido que se trata de un problema ambiental, y que en ningún momento la Junta ha eludido sus competencias, como prueban los informes y las mediciones encargadas. Pero ha resaltado la necesidad de abordarlo desde un punto de vista técnico, al igual que se está realizando, ha añadido, con el proyecto de tierras raras al que ha aludido Llorente.

Finalmente, los grupos parlamentarios de PP y Podemos en las Cortes de Castilla-La Mancha han encontrado apoyo mutuo a la hora de sacar adelante sendas resoluciones por las que el Parlamento regional insta al Gobierno autonómico a retirar los restos de amianto en varias parcelas del barrio del Polígono de Toledo. Así, la resolución de Podemos ha encontrado el apoyo de los 16 diputados del PP, y con ella las Cortes instan al Gobierno a realizar un estudio exhaustivo para conocer la ubicación y la cantidad total de residuos de amianto existentes en Castilla-La Mancha, empezando con los que se encuentran en la zona del arroyo Ramabujas y las fincas colindantes en el barrio del Polígono.