El convenio sanitario con Madrid regresa a las Cortes de Castilla-La Mancha
A mediados del pasado mes de marzo las Cortes de Castilla-La Mancha aprobaron el convenio sanitario entre esta región y la Comunidad de Madrid. Se trataba de una de las medidas más mimadas por el Ejecutivo anterior de María Dolores de Cospedal pese a la oposición, no solo política, sino también de las plataformas en defensa de la sanidad pública y de los colegios profesionales de médicos. Hace tres semanas, con las tornas políticas cambiadas, el nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha anunció que quería anularlo, provocando la oposición del PP, que hoy ha vuelto a defenderlo. Ante esta situación, tanto PP como PSOE han decidido que el tema regrese ahora a las Cortes regionales. El pleno del próximo jueves celebrará un debate general sobre esta cuestión, uniendo las dos peticiones realizadas por ambos grupos parlamentarios.
Lo que a todas luces será un nuevo enfrentamiento político a costa del convenio viene ya precedido por el cruce de acusaciones desde el anuncio de su posible anulación. Actualmente, la Junta está evaluando la manera “correcta” de eliminar este convenio, en base a que los hospitales planteados para atender a los castellano-manchegos no tienen “capacidad ni especialidades suficientes”. Concretamente, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández, afirmó que no favorecía a Castilla-La Mancha ni tampoco a sus ciudadanos.
Con el transcurso de los días, se han conocido más detalles sobre el objetivo del Gobierno regional. Quiere invalidar la parte del convenio referida a la provincia de Toledo pero no así a la que afecta a Guadalajara. El portavoz de la Junta, Nacho Hernando, dejó claro que sería una anulación parcial y que, además, en caso de no poder llevarse a cabo, se buscaría “una alternativa”. Desde el PP han insistido en defender este proyecto de Cospedal y del que fuera su consejero de Sanidad, José Ignacio Echániz. Han afirmado que los ciudadanos quieren el convenio, y han acusado al PSOE de preocuparse más por los intereses políticos que por la sanidad.
En este debate previo también han participado las plataformas en defensa de la sanidad pública. Desde la Plataforma de Toledo han insistido en que esta iniciativa supone “pagarle a la sanidad de Madrid” y que no estaba pensado para Castilla-La Mancha. En el caso de Guadalajara, la Plataforma fue aún más allá pidiendo uno nuevo pero financiado por los fondos de cohesión.
Lo cierto es que el convenio sanitario recibió la información favorable del Consejo Consultivo de Castilla-La Mancha el pasado mes de marzo, aunque con importantes consideraciones, como la indefinición en el precio de los servicios prestados a los usuarios de la provincia de Toledo, entre otras muchas. Son algunos de los motivos que ha esgrimido el Gobierno regional para promover su anulación. Ahora, serán de nuevo las Cortes generales el escenario en el que se debatirá el futuro de esta polémica iniciativa.
