Hasta 57.000 personas se han beneficiado del Plan contra la Pobreza Energética desde 2016
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha firmado hoy con el presidente de Cruz Roja en Castilla-La Mancha, Jesús Esteban Ortega, el tercer convenio de colaboración para desarrollar el Plan Regional contra la Pobreza Energética en el año 2018. En ella se incluyen novedades y anunciadas, como la posibilidad de que las familias sean beneficiarias de dos ayudas económicas al año de 150 euros cada una, cuando lo prescriba el trabajador social o trabajadora social de Atención Primaria.
Por otro lado, se contempla la incorporación de las Ayudas de Emergencia Social para prevenir cortes de suministros energéticos y la formalización de nuevos convenios con otras empresas suministradoras de energía, además de Gas Natural e Iberdrola, así como la cofinanciación del 50 por ciento de la factura de los hogares que tengan reconocido el bono social como consumidor vulnerable severo. Además, se actualizará y ampliará el protocolo de colaboración con la Consejería de Bienestar Social en materia de consumo.
“Se trata de un plan que forma parte de la Estrategia Regional contra la Pobreza en Castilla-la Mancha”, ha resaltado Sánchez, quien ha apuntado que esta estrategia plantea, entre otros objetivos, reducir el número de personas que no pueden permitirse mantener su vivienda con una temperatura adecuada, particularmente, las familias que tienen hijos menores de 16 años a cargo.
El balance del Plan, hasta este mes de marzo y desde 2016, es que han sido 57.000 los castellano-manchegos y castellano-manchegas que se han beneficiado del mismo. Casi la mitad de ellos, 26.537 son menores. En total, se han beneficiado de las ayudas económicas 54.500 personas, al tiempo que se han paralizado 1.046 cortes de suministro, que han llegado a 2.500 ciudadanos de Castilla-La Mancha.
