Las aves protegidas envenenadas en Toledo pasan desapercibidas
Un mes ha pasado desde que se encontraron las, por lo menos, veinte aves, especies protegidas, envenenadas en la localidad de Nambroca en Toledo. A pesar de haber recibido la denuncia, Ecologistas en Acción y WWF España señalan que el Gobierno no ha proporcionado detalles o avances en la investigación, a la vez que tampoco ha adoptado medidas cautelares en la zona para evitar que se repitan los hechos. Ambas instituciones piden a la Consejería que adopte las medidas recuperadoras y que invierta en los esfuerzos necesarios para localizar a los responsables.
La Consejería de Agricultura anunció el pasado diciembre, a través de nota de prensa, que se habían encontrado cebos envenenados en la provincia de Toledo, pero no ofreció más datos que la investigación de Agentes Medioambientales y el Seprona de la Guardia Civil seguía en proceso. En diciembre se activó también el “Protocolo de localización de venenos en el medio rural” que llevó también la Unidad de lucha contra el uso ilegal de venenos a la provincia de Toledo
Los datos que Ecologistas en Acción y WWF España aseguran tener señalan que el caso sería de importante graves, y que incluso podría llegar a tratarse de uno de los más importantes en España, y sin duda, el más relevante de todos los conocidos en el país durante 2014. Al menos veinte animales fueron encontrados muertos o intoxicados, entre ellos más de una docena de rapaces. En este grupo se encontraron al menos cinco milanos reales, población que ha sido declarada en peligro de extinción en España y en la región, así como cinco aguiluchos laguneros y dos ratoneros.
Ambas organizaciones sospechan que las investigaciones ya se habrían dado por concluidas y que, en realidad, la Consejería de Agricultura no hubiese tomado ningún tipo de medidas para evitar que no sólo los hermanos, sino también las personas pudiesen verse afectadas nuevamente por el envenenamiento, ni tampoco se ha preocupado de reparar el daño causado a la fauna silvestre. Así, señalan también que los protocolos del Plan contra el uso del veneno en el medio natural en Castilla-La Mancha contemplan, independientemente de si se determina o no quién ha sido el culpable, que cuando hay un daño grave sobre la fauna se deberían adoptar medidas recuperadoras. Para eso, lo normal es que se suspenda la actividad cinegética para recuperar la población de especies afectadas.
La Sociedad Albacetense de Ornitología ha comunicado también su preocupación al ver que los esfuerzos de los agentes medioambientales y de los técnicos de la Consejería de Agricultura se ven frustrados a la hora de llegar a la burocracia, donde los procedimientos, según la organización, “se eternizan y llegan a caducar”.
