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Más solidaridad y sensibilización, claves en la nueva estrategia de cooperación de las ONG

Europa Press

Alicia Avilés Pozo

  • Prioridad a los derechos humanos, voluntariado, comercio justo y economía solidaria son algunas de las propuesta del Plan Estratégico regional
  • El proyecto, que se remitirá a partidos políticos, instituciones y colectivos de todo tipo, procede de la Agenda 2030 para erradicar la pobreza mundial

“La solidaridad es la ternura de los pueblos”. Esta cita de la escritora nicaragüense Gioconda Belli encabeza la presentación de la Propuesta de Plan Estratégico de Cooperación al Desarrollo que la Coordinadora de ONGD de Castilla-La Mancha ha elaborado para su debate y diálogo y que ha remitido a partidos políticos, instituciones y entidades de todo tipo para cumplir con los objetivos de erradicación de la pobreza mundial marcados en la Agenda 2030 aprobada por la Asamblea General de la ONU en el año 2015. En este documento se recogen las principales y más necesarias líneas de actuación, agrupadas en varios objetivos que van desde la defensa de los derechos humanos, hasta el voluntariado y la sensibilización como acciones de vinculación para la sociedad civil.

El proyecto estratégico está dividido en cinco ejes: la mejora del impacto en los derechos humanos, la promoción de una ciudadanía “sensible y comprometida con la solidaridad”, los instrumentos de cooperación, el marco presupuestario y las prioridades geográficas. Aparte, incluye otra batería de propuestas para evaluación, seguimiento, calidad y coordinación de la cooperación al desarrollo.

Dentro del primer eje se encuentran los objetivos destinados a promover las necesidades humanas básicas, el primero de ellos la promoción del derecho universal a la salud y las acciones que conlleva respecto a atención primaria, salud materna, salud infantil, salud sexual, nutrición básica y prevención y control de enfermedades. Igualmente se incluye el objetivo del derecho a la educación, con especial atención a la igualdad de acceso a la educación primaria, la educación en valores e igualdad, y el apoyo a formas educativas alternativas y a fortalecer los sistemas públicos.

Otros objetivos incorporados en este primer bloque son el derecho al agua, al saneamiento y la higiene, a una vivienda digna y a la habitabilidad básica. Seguidamente, las ONG de desarrollo incluyen la promoción de la “gobernanza democrática”, es decir, el fortalecimiento de las normas que dan legitimidad a los poderes públicos y con los que gobierna a la sociedad civil. A ello añaden el fortalecimiento del poder local y las instituciones descentralizadas, las organizaciones sociales y “la cultura de la paz y prevención de los conflictos violentos”.

La mejora de las capacidades económicas y productivas basadas en modelos de desarrollo sostenible es otra de las líneas prioritarias del documento. En este caso, cumple un papel esencial la mejora de la capacidades productivas, sobre todo de los grupos sociales más desfavorecidos, y la diversificación de iniciativas económicas respetuosas con el medio ambiente; así como el derecho a la alimentación, la seguridad, la soberanía alimentaria y el desarrollo rural. La lucha contra el cambio climático, la gestión sostenible de los ecosistemas, y el empoderamiento de la mujer ocupan también un lugar destacado.

Sobre la acción humanitaria, los objetivos del Plan Estratégico se basan principalmente en mejorar este tipo de actividades, focalizándolas en la provisión de agua, higiene, atención nutricional, refugio, atención sanitaria y otro tipo de asistencia. En el caso de que las acciones sean de emergencia, como en crisis humanitarias, considera necesario adecuar los mecanismos de financiación para una “respuesta ágil y eficiente”.

Acciones formativas para funcionarios y docentes

El segundo bloque, destinado a la promoción de “una ciudadanía comprometida”, incluye medidas muy destacables como mejorar la capacidad de análisis de la sociedad castellano-manchega. Para ello, propone acciones de sensibilización que van desde la implicación de los medios de comunicación hasta procesos de Educación para el Desarrollo de calidad. En este último caso, apuesta por acciones formativas para profesionales de la Administración Pública y para docentes.

Ese compromiso social en la lucha contra la pobreza también pasa, según el Plan Estratégico, por fomentar el voluntariado y comportamientos responsables en consumo, comercio justo, finanzas éticas y una “cultura global de respeto a las personas y al medio ambiente”.

Tras detallar los numerosos instrumentos de cooperación a llevar a cabo -desde la investigación hasta el comercio justo y la economía solidaria-, la Coordinadora regional de ONGD aborda el marco presupuestario, donde propone que la Junta de Castilla-La Mancha destine un incremento progresivo a políticas de cooperación en la legislatura: 0,4% en 2017; 0,5% en 2018 y un 0,7% en 2019. Finalmente establece los criterios geográficos: zonas históricas de la cooperación al desarrollo en Castilla-La Mancha, Países Menos Adelantados (según la clasificación de Naciones Unidas), zonas en conflicto armado, y zonas prioritarias en el Plan Director de la Cooperación Española.  

Precisamente, la Coordinadora regional de ONGD y la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) han firmado la creación del curso de verano 'Los objetivos de desarrollo sostenible fijados en la Agenda 2030: Propuestas dirigidas a transformar nuestro mundo'. Se celebrará en el Campus de Albacete los próximos 28 y 29 de junio. El objetivo será sensibilizar a la población en aspectos relativos a la defensa de los derechos humanos y la cooperación al desarrollo.

El acuerdo compromete a las partes a desarrollar conjuntamente cursos, seminarios y jornadas sobre los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas, así como a elaborar y difundir un catálogo de ofertas de voluntariado en ONGD para estudiantes, entre otras iniciativas.

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