El cambio climático agravó los incendios en los montes valencianos
El cambio climático agravó los incendios forestales producidos este año en la Comunidad Valenciana. Es el veredicto de José Maria Ángel, director de la Agencia de Respuesta a las Emergencias, que se encarga de la prevención y extinción de incendios.
Ángel ha comparecido este viernes a petición propia en les Corts para dar cuenta del balance de incendios forestales producidos este verano. El déficit hídrico -la sequía- y las corrientes de aire cálido han favorecido la propagación de los fuegos. “Hasta ahora, sólo regiones como Canarias o Andalucía eran tradicionalmente receptoras de corrientes saharianas, pero en cuatro de los cinco grandes incendios hemos sufrido vientos cálidos que han agravado la situación”, ha destacado.
“Asistimos a un año hidrológico extremadamente seco, según confirman las asociaciones agrarias y la comunidad científica, y el déficit pluviométrico -superior al 45%- también ha actuado como condicionante en los grandes incendios, con consecuencias más graves en aquellas comarcas con una falta de lluvia más acusada”, ha agregado Ángel.
Los cinco grandes incendios que ha sufrido la región (Bolbaite, Carcaixent, Artana, Xàbia y Bolulla) tienen varios puntos en común: fueron virulentos, de rápida propagación, con gran carga de combustible, empezaron tras el mediodía -en las horas de mayor calor- y coincidieron en zonas orográficas complicadas y con escasas precipitaciones. Estos cinco incendios concentraron el 95% de la superficie total quemada.