Los ayuntamientos valencianos reorganizan las cabalgatas: calles más anchas, sin caramelos y PCR para los Reyes Magos
El repunte de contagios de Covid-19 de los últimos días, especialmente de este fin de semana, ha hecho que muchos ayuntamientos valencianos se hayan replanteado como se organizan las tradicionales cabalgatas de reyes. Empezando por la ciudad de València y acabando por Alcoi -la localidad con la cabalgata más antigua de España- en mayor o menor cantidad se han tenido que hacer modificaciones de los actos para poder garantizar la seguridad sanitaria y respetar las medidas decretadas por la Generalitat.
En la ciudad de València se ha optado por suprimir el tradicional desfile de Reyes ante el riesgo de aglomeraciones y trasladar el espectáculo a la plaza de toros, de forma que se pueda controlar el aforo y la distancia de seguridad. El acceso al recinto se hará mediante entradas que se repartirán de forma gratuita.
En Alicante los Magos de Oriente llegarán en barco a un atraque del puerto y sólo podrán ser vistos en la lejanía ya que no está permitido el contacto directo. Desde allí se dirigirán a la plaza de toros para ser recibidos por los más pequeños en un recinto donde se ha reducido el aforo y sólo se han distribuido 2.800 invitaciones de las 5.500 previstas inicialmente. Éste será el único momento en que puedan escuchar las voces de los Magos porque ha quedado suprimida su alocución desde el balcón principal del Ayuntamiento y la posterior Adoración en la plaza. Habrá también una ampliación del recorrido donde se habilitarán sillas para controlar el acceso. Los reyes también se someterán a un test de antígenos y a una PCR para descartar síntomas de la Covid-19. Esta medida les permitirá participar en la Cabalgata sin mascarilla, pero sin poder acercarse a los niños.
En Elche se ha escogido un recorrido más largo del habitual el cual discurrirá por las calles más amplias y con las aceras más anchas de la ciudad para incrementar el número de sillas que saldrán a la venta, un total de 11.500. El objetivo de estos cambios ha sido generar espacios más amplios y abiertos para cumplir con las nuevas normativas y recomendaciones para estos eventos.
En Castelló habrá un recorrido más largo y por calles más amplias de las habituales, vallado en algunos tramos, de forma que se eviten concentraciones de personas. No se lanzarán caramelos desde las carrozas y los Reyes Magos recorrerán los barrios y los grupos periféricos de la ciudad en coches, de forma que se diversifiquen también los puntos donde poder verlos.
En Sagunt se ha eliminado la tradicional llegada de los Reyes Magos al puerto marítimo y en cambio habrá dos actos estáticos en cada uno de los centros urbanos. Así habrá una ceremonia en el Teatro Romano y otro en los jardines de la Gerencia, actos para los cuales habrá control de aforo y también la obligatoriedad de presentar el pasaporte Covid por parte de los adultos.
En Alcoi se ha organizado una cabalgata que se espera que sea más fluida. En cuanto a la Adoración será un acto estático en el campo de futbol del Collao y se ha delimitado el aforo, por lo que para acceder se deberá poseer el certificado de vacunación con la pauta completa que se mostrará para poder acceder junto al DNI para certificarlo junto a la entrada. Es obligatorio el uso de la mascarilla para todas las personas en todo momento, no se podrá por tanto, fumar ni comer ni beber.
En Xàtiva se ha suspendido el acto de bienvenida de los Reyes en la plaça de la Seu y también la adoración en el Belén Monumental. La programación conservará la cabalgata por las calles que avanza su horario a las 18,30h e incrementará su recorrido para dispersar la afluencia de gente. El desfile no finalizará en la Albereda Jaume I, sino que se alargará hasta la Avinguda República Argentina.
Cullera ha optado por duplicar el recorrido de la cabalgata de los Reyes Magos y suprimir la concentración final para evitar así aglomeraciones. Además, todos los participantes en el desfile real deberán someterse a un test de antígenos.
En cambio otras localidades han optado directamente por la cancelación de las cabalgatas por segundo año consecutivo como es el caso de Godella.
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