Ximo Puig califica de “exitosa dentro de las limitaciones” la gestión del incendio de Llutxent
El president de la Generalitat, Ximo Puig, comparece este viernes en la Diputación Permanente de las Corts valencianas para explicar la gestión del incendio de Llutxent, que arrasó 3.200 hectáreas en seis municipios (Llutxent, Gandia, Pinet, Ador, Barx y Quatretonda).
El jefe del Consell ha valorado el operativo como “acertado” y “exitoso”, “dentro de las limitaciones que tiene la lucha contra los incendios”, además de resaltar en varias ocasiones las complicaciones del incendio, tanto por la orografía como por las condiciones meteorológicas.
Un “operativo acertado” y una actuación “global, precisa y coordinada”, teniendo en cuenta la dificultad del incendio y que se dieron once fuegos simultáneos sólo en la provincia de Valencia.
“No existen fórmulas mágicas (para luchar contra el fuego), pero hemos avanzado mucho”, considera el president, que ha anunciado que el lunes comenzarán las actuaciones en zonas urbanas, presupuestadas con 600.000 euros. Y en las zonas erosionadas, dos millones de euros. La evaluación del grado de afección de la viviendas se está desarrollando entre la Conselleria de Vivienda y el Ayuntamiento de Gandia. “La prevención de incendios es una política prioritaria para la Generalitat”, añade el president.
El próximo martes se reunirá el pleno del Consell para aprobar las ayudas de emergencia a los afectados. Las personas que han perdido su primera vivienda ya tienen una solución habitacional, ha dicho el president. Las ayudas anunciadas cubrirán daños en bienes muebles e inmuebles a los propietarios y “llegarán a la cantidad que haga falta”. El Gobierno valenciano se da un plazo de 45 días para cuantificar los daños en las zonas urbanas.
El president también ha facilitado las cifras que cuantifican el esfuerzo en la prevención de incendios. Según sus datos, en 2016 se incrementó el presupuesto para emergencias en un 21%, en 2017 se crearon seis nuevas unidades de bomberos y en 2018 volvió a incrementarse el presupuesto para emergencias, esta vez en ocho millones de euros.
Puig ha hecho mención a la situación del personal de extinción y ha explicado el acuerdo con los brigadistas forestales de Tragsa para ser trabajadores públicos, con un incremento de sueldo de un 30% pactado con los sindicatos, derivado de su aumento de responsabilidad. Estos brigadistas pasarán a ser bomberos forestales y el decreto se aprobará el 7 de septiembre.
La oposición critica descoordinación
La síndica de Ciudadanos, Mari Carmen Sánchez, ha exigido “más coordinación, más medios y un protocolo de actuación real para la prevención y extinción de grandes incendios”. Sánchez considera “el Consell no ha estado a la altura en el incendio de Llutxent” debido a “la falta de medios, la nula coordinación y el caos para desalojar a los vecinos”. En este sentido, ha considerado que “poco o nada se hace para el mantenimiento de los bosques, lo que demuestra la irresponsabilidad y la incapacidad de gestión.
El diputado popular Luis Santamaría ha acusado al Ejecutivo de una baja ejecución presupuestaria para la prevención de incendios mientras a su partido “nos llaman terroristas medioambientales”, recordando las acusaciones del diputado de Compromís, Juan Ponce, que criticaba la política urbanística del PP.
Además, Podemos reitera la oposición a una empresa pública para los bomberos forestales, insistiendo en la unificación de los cuerpos de emergencias y exige que el Consell determine su política forestal.