Incendios forestales extremos

Miles de hectáreas de bosques carbonizados

El fuego adquiere vida propia en los montes y aviva la emergencia climática

El 22 de agosto habían sido controlados el incendio declarado en la Vall d'Ebo, que quemó cerca de 12.000 hectáreas, y el de Bejís, que afectó a unas 19.000 hectáreas, tras una semana de llamas pavorosas, desalojos de poblaciones y durísimos esfuerzos de los efectivos que luchan contra el fuego. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó ese día los parajes carbonizados del interior de Castellón y anunció que el Consejo de Ministros declararía zona catastrófica todo el territorio peninsular afectado este verano por lo que describió como “incendios de nueva generación”.

El presidente destacó que este año han ardido en España 223.000 hectáreas, mientras que el año pasado fueron 51.000. En 2012, el peor registro hasta ahora, fueron 116.000 las hectáreas afectadas. Sánchez fue muy claro al advertir: “Estamos ante el verano más cálido desde que hay registros, es decir, desde 1961, y la previsión es que los próximos sean aún más cálidos. La emergencia climática es más real que nunca y hay que luchar contra ella en la toma de decisiones desde todos los ámbitos”.

Las ayudas derivadas de la declaración por el Gobierno de “zonas gravemente afectadas por emergencias de protección civil”, que es lo que se conoce como “zona catastrófica”, se complementarán con las ayudas que anunció el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, quien ha tenido que atender este verano desde el Centro de Coordinación Operativa Integrada (Cecopi) unas alertas que superaban el ámbito de la estricta lucha contra los incendios forestales.

Porque, en efecto, la virulencia de los incendios de sexta generación convierte su combate en un asunto de protección civil. Hay incidentes que lo enfatizan, como la docena de heridos, de los que seis tuvieron que permanecer hospitalizados, producidos al intentar algunos pasajeros abandonar un tren que quedó detenido media hora por las llamas entre Caudiel y Barracas y acabó dando marcha atrás.

La maquinista de ese convoy declaró que, al ver la magnitud de las llamas, contactó con el puesto de mando de la lucha contra el incendio y que “esa fue la primera noticia que tuvo el puesto de mando de que el fuego estaba ya casi en las vías”. Un asunto que probablemente dará que hablar en la investigación de lo ocurrido.

Paliar la desolación que han causado estos incendios, además de carbonizar tantos árboles y tanta vegetación, en lo que se denomina la interfaz urbano-forestal, es decir en casas, inmuebles y propiedades, será uno de los principales objetivos de las medidas que prepara la Generalitat Valenciana. La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, anunció la creación de dos oficinas que agilizarán las ayudas a los 26 municipios afectados por los incendios de Vall d'Ebo y Bejís.

Otra cuestión es qué hacer, cómo prepararse para lo que se avecina. Una cuestión sobre la que ya tiene una propuesta la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, al reclamar 86 millones de euros de presupuesto para que el Gobierno valenciano sea el primero en invertir más en prevención que en extinción de incendios forestales. Sin duda, la emergencia climática pide paso en la agenda política de la mano del fuego extremo, la sequía intensa y las olas de calor.

Sigue el goteo de muertos y heridos en actos taurinos

Unos festejos sangrientos: los 'bous al carrer'

Ya son siete los muertos en festejos taurinos este año en la Comunitat Valenciana. Sin contar el último percance, los bous al carrer acumulan 31 fallecidos y más de 5.400 heridos desde 2014, y eso pese a que hubo dos años de mínima actividad debido a la pandemia de la Covid-19. No parece una estadística tolerable, por mucho que se invoque la tradición y el carácter popular de ese tipo de actos, en los que, además, se incumplen a menudo las normas que prohíben la participación de menores.

Son pocos los municipios que han optado por prescindir de este tipo de festejos, siempre bajo la presión de la derecha, que ha convertido los toros en una bandera. Pese a ello, el Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna, gobernado por Compromís y el PSPV, ha decidido no celebrarlos este año tampoco, después de dos temporadas de suspensión por las restricciones sanitarias, porque “la sociedad evoluciona”. “Hemos hecho lo que pocos se han atrevido”, señaló el alcalde, Sergi González. Los partidarios de los toros apenas reunieron a unas decenas de personas en una concentración de protesta contra la decisión del Ayuntamiento.

El Gobierno del Pacto del Botánico ha avanzado muy tímidamente, en materia de normativa de seguridad, en un asunto que reclama medidas más estrictas. La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha mostrado su preocupación por el número de fallecidos y ha apelado a revisar protocolos y medidas, dado que, “por encima de las tradiciones, está siempre la vida de las personas”.

Festival del décimo aniversario de elDiario.es

'Diario vivo', periodismo en escena

Dentro del programa del festival del décimo aniversario de elDiario.es, que se celebrará en València del 22 al 24 de septiembre, se incluye la representación, en el teatro Principal a las 21.30 del 24 de septiembre, de Diario vivo, un espectáculo en el que periodistas de elDiario.es suben por primera vez al escenario para contar en primera persona cómo se hace periodismo a pesar de todo. Diario Vivo es el primer y único espectáculo de live journalism de España, un formato que triunfa en ciudades de todo el mundo como San Francisco, Nueva York, París o Helsinki, y en el que periodistas, artistas y personalidades de diferentes ámbitos se reúnen en el teatro para contar por primera vez historias que les han marcado. Si eres socio o socia tendrás un 40% de descuento con un código que recibirás en tu correo. Puedes comprar aquí tu entrada.

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