La junta de Gobierno local del Ayuntamiento de València aprobó el pasado 15 de julio arrendar a LABORA, el Servicio Valenciano de Empleo y Formación, parte del edificio de propiedad municipal conocido como “La Base”, que fue la sede del equipo Alinghi en la America's Cup, ubicado en la Marina de València “con el objetivo de crear un espacio compartido del Sistema Nacional de Empleo para la innovación y experimentación en materia de orientación y emprendimiento para el empleo”.
El acuerdo no estuvo exento de polémica ya que se aprobó únicamente con los votos de Compromís, puesto que los socios de Gobierno del PSPV se opusieron al considerar que el modelo de gestión de la Marina, tras disolverse el Consorcio Valencia 2007, está por acordar.
Con todo, la polémica no pasó a mayores. Sin embargo, el PP trata ahora de frenar el proyecto mediante la presentación de un recurso de reposición presentado contra el mencionado acuerdo al considerarlo contrario a derecho, solicitando por tanto su anulación.
El objetivo de la cesión de parte de La Base a LABORA, entidad dependiente de la Conselleria de Economía, es “continuar impulsando La Marina como un polo de atracción de la innovación y de dinamización de los barrios marítimos de València, una apuesta por la actividad económica arraigada al territorio, que quiere crecer gracias al talento local, a las universidades y las instituciones, como es el caso de Labora”.
El edificio es de propiedad municipal y está situado en un entorno accesible, con facilidad de acceso y comunicación con el resto de la ciudad, en un entorno de gran afluencia de público junto a los barrios del Grau y el Cabanyal-Canyamelar.
Parte de la planta baja de La Base ya está ocupada por el Centro Mundial de Alimentación Urbana Sostenible (CEMAS), un espacio desarrollado por el Ayuntamiento de València en colaboración con la FAO, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación.
Ahora, el Ayuntamiento arrienda a LABORA una superficie de 2.086,69 m², distribuidos entre la planta baja y la primera planta del inmueble para instalar un Centro de Orientación, Emprendimiento, Acompañamiento e Innovación para el Empleo (COE), para lo que realizará obras de carácter permanente y estructural que redundarán en beneficio del edificio, por lo que el Ayuntamiento ha establecido una carencia de pago durante los primeros cinco años del contrato.
Las obras de habilitación que emprenderá LABORA mejorarán la iluminación, la ventilación y la climatización, el aislamiento térmico, las medidas de seguridad, de prevención de incendios y la eficiencia energética del edificio tendrán un coste estimado de más de cuatro millones de euros.
El recurso presentado por el PP y firmado por su portavoz municipal, María José Catalá, y por la concejala, Paula Llobet, cuestiona, entre otras cosas, la concesión directa del inmueble sin abrirse un concurso público, y sobre todo la ausencia de estudios de mercado que justifiquen la cuantía que LABORA deberá abonar al Ayuntamiento en concepto de alquiler.
Según consta en el expediente municipal aprobado, para calcular la renta mensual que deberá abonar el organismo se ha tomado como referencia el contrato de arrendamiento de parte de la planta baja del edificio para la ubicación de las oficinas del CEMAS, que se fijó para espacios interiores en 3,75 euros el metro cuadrado al mes y una vez aplicado el descuento del 40% previsto para las instituciones y entes públicos en la celebración de eventos quedaría en 2,25 euros al mes.
Aplicando este precio de referencia se establece una renta mensual de 4.690,55 euros al mes, más el 21 % de IVA, con un periodo de carencia de pago de 5 años a contar desde el día de la firma del contrato, dado que LABORA va a destinar aproximadamente 4,2 millones de euros a realizar obras de habilitación de carácter permanente y estructural que redundarán en beneficio del edificio y que al finalizar el plazo del contrato no darán lugar a indemnización alguna.
El expediente advierte de que el edificio se encuentra “en una zona del Plan Especial La Marina Real Juan Carlos I cuya ordenación, usos y actividades son exclusivos y excluyentes para con el resto de la ciudad de València, por lo que no se pueden tener datos económicos de alquileres o ventas que no sean los propios que maneja el Consorcio Valencia 2007”.
Al respecto, fuentes municipales han explicado que el Ayuntamiento tiene el deber de colaborar con las demás administraciones, entre ellas la de la Generalitat, en la que se integra LABORA, entidad encargado de gestionar las políticas de empleo y formación profesional y la intermediación entre oferentes y demandantes en el mercado de trabajo y la orientación laboral en la Comunitat Valenciana.
“Aunque se podría haber aprobado una cesión de uso gratuita y directa, pues la normativa vigente lo prevé, se ha decidido emplear las tarifas que venía empleando el Consorcio Valencia 2007, que gestiona el espacio de la Marina de València, dado que por sus características especiales –titularidad pública y ausencia de oferta privada- no existe en ese ámbito un mercado a cuyos precios pueda referirse un estudio de mercado”, han añadido.
Asdemás, han afirmado que “no puede equipararse el procedimiento seguido con el que se tramita para otorgar el aprovechamiento por un particular del edificio. En el caso de LABORA se trata de un organismo autónomo de naturaleza administrativa de la Generalitat, que sirve al interés general, por lo que el ordenamiento prevé ciertas excepciones a la regla general del principio de rentabilidad y de la concurrencia”.
Desde el gobierno municipal han lamentado “que María José Català quiera impedir la instalación de un centro público de referencia que viene a consolidar el hub de innovación que se está desarrollando en la Marina y q va a ayudar a jóvenes valencianos con proyectos innovadores”.
Este proyecto reforzará “la colaboración público privada con el objetivo de dar oportunidades de trabajo a los jóvenes y de mejorar la calidad de vida de todas las personas a través de la innovación y de la creación de nuevos servicios en multitud de áreas”.
Se trata de ir creando en la Marina de València “un polo de atracción de talento que sea reconocido en toda Europa. De hecho ya hay muchas empresas que estan instalándose aquí con esa intención, como Telefónica, CaixaBank (Insmonia) o Lanzadera, entre otros proyectos que irán conociéndose próximamente”.
Por este motivo, han afirmado que “es incomprensible la actitud de dificultar y paralizar un proyecto así si no es porque se anteponen sus intereses partidistas a los de toda la ciudad de València”.
Espacio compartido con el Sistema Nacional de Empleo
El centro se convertirá en un espacio compartido del Sistema Nacional de Empleo para la innovación y experimentación en materia de orientación y emprendimiento para el empleo.
Responde a la necesidad de compartir esfuerzos entre las diversas entidades y proyectos del ámbito de la orientación y el emprendimiento a todas las comunidades autónomas para impulsar planes innovadores que fomenten la inserción laboral y el empleo de calidad, de forma que sigamos profundizando en el carácter innovador del distrito formado por la Marina de València focalizando en esta parte de la ciudad estos aspectos.
En la Planta Primera se ubicará la Subdirección General de Orientación e Intermediación Laboral con tres servicios diferenciados, el de páginas de Orientación, el de Orientación online a usuarios de LABORA y de Prospección - Espai Empreses. En total, contará con unos 26 trabajadores y dos directores.
También estará en la planta primera la Dirección General de Emprendeduría, Cooperativismo y Economía Social, responsable de elaborar y ejecutar los programas y acciones en estas materias, que albergará a alrededor de 28 trabajadores/as y dos directores/as. En el espacio reservado en el COE de la planta baja se habilitará un espacio de coworking.