València adjudica el contrato para impulsar carriles bici, zonas peatonales e itinerarios escolares seguros

La junta de Gobierno del Ayuntamiento de València prevé aprobar este viernes la adjudicación del contrato 'Mantenimiento de la señalización de tráfico y del balizamiento de la ciudad de València' por un plazo de tres años (prorrogable a dos más) y un presupuesto máximo de seis millones de euros, IVA incluido. Se adjudica a la unión temporal de empresas (UTE) Serveo-Eysa que ha ofertado una baja económica del 8,5%. 

Su objeto es la realización de los trabajos necesarios para la nueva instalación y mantenimiento en buen estado de conservación de los elementos que componen la señalización vertical, el balizamiento, los sistemas de calmado del tráfico y los sistemas de protección y contención de vehículos y peatones.

Del mismo modo se realizarán con cargo a este contrato los trabajos de nueva instalación y del mantenimiento de la señalización horizontal o marcas viales derivado del deterioro propio de los materiales y de los daños ocasionados por los vehículos.

Dentro de las actuaciones indicadas, se comprenden también aquellas que tienen como fin realizar operaciones de rediseño táctico, siguiendo criterios de seguridad vial y movilidad sostenible buscando el mayor grado de aplicación de estos criterios y estableciendo prioridades en función del grado de vulnerabilidad de las personas usuarias.

Esta nueva licitación se adapta a la nueva realidad derivada de las actuaciones realizadas las dos últimas legislaturas, ya que el contrato contempla el gran incremento de la red de itinerarios ciclistas, nuevas zonas peatonales y nuevas rutas escolares seguras, así como las actuaciones tácticas llevadas a cabo en los últimos años por el servicio de Movilidad Sostenible.

Los ámbitos de actuación principales del contrato se integran en el ámbito de las competencias del servicio, los cuales son, entre otros, los siguientes: mantenimiento preventivo y reparaciones de la señalización vertical, de las marcas viales y del balizamiento y de elementos de protección; sustitución por obsolescencia de elementos e instalaciones; modificaciones derivadas de cambios en las vías públicas (por ejemplo, carriles bici, peatonalizaciones, cambios de ordenación de sentidos o estacionamiento, modificación de ubicación de contenedores de residuos, actuaciones de urbanismo táctico, actuaciones de calmado del tráfico, actuaciones de mejora de seguridad vial o rutas escolares seguras); atención a las solicitudes de la ciudadanía como por ejemplo instalación de aparcabicis, plazas de estacionamiento para personas con movilidad reducida o zonas de carga y descarga.