La Agencia Efe pone memoria y emoción a los Goya con fotos de todas las galas

Los fondos fotográficos de la Agencia Efe, recogidos en sus 75 años de historia, guardan tesoros que, por una sola vez, van a arropar la fiesta del cine más grande de España: los Premios Goya recibirán este año a sus invitados con una selección de 28 fotografías de Efe, una por cada edición de la gala.

Una selección que ha sido realizada por un equipo de la Agencia en colaboración con la Academia del Cine y que tomará forma la noche del sábado en los pasillos de acceso al auditorio del Centro de Convenciones y Congresos Príncipe Felipe, del madrileño hotel Auditorium, donde se celebra la gala número 29, en formato de dos por tres metros.

Fotos cargadas de emoción que son auténticas provocaciones a la memoria y que revelan el paso del tiempo para algunos de los invitados, muchos de los cuales, 29 años después, volverán a pisar la alfombra roja (este año, color fucsia debido al patrocinio de una firma española de calzado).

Entre ellos, destacan las imágenes de Pedro Almodóvar o Alejandro Aménabar, no sólo por ser dos de los directores con más nominaciones a los Goya, sino porque protagonizan algunos de los momentos únicos captados por el flash.

Como la foto en la que un emocionado Almodóvar, patilla fina y cabellera despeinada, felicita su 32 cumpleaños al entonces príncipe Felipe, una imagen que no tiene toda la calidad de otras instantáneas de Efe, pero fue la más simpática de la XIV edición, la del año en que “Todo sobre mi madre” se llevó siete “cabezones”.

Del millón de fotos de que dispone la Agencia Efe se han seleccionado estas 28 de entre cerca de 3.000; en las primeras ediciones, Efe solo retrata a los ganadores, al principio sólo en fotos corales, informativas y en blanco y negro: entonces, únicamente se hacían 20 o 30 impactos por gala.

Hoy la Agencia transmite no menos de trescientas por edición.

La exposición opta, en primer lugar, por el criterio emotivo para seleccionar la foto que representará a cada una de las ediciones; a veces, como sucede con la famosísima foto del entonces presidente de la Academia José Luis Borau mostrando las palmas de sus manos pintadas de blanco, porque “era la foto” de aquella gala.

Aquel momento lo captó Ángel Millán; Efe ha tenido y tiene en sus filas a fotógrafos que han ganado los premios más prestigiosos del gremio, del Nacional de fotografía al Ortega y Gasset de periodismo fotográfico.

La Agencia Efe es la única que guarda testimonios de todas y cada una de las galas; a partir del año 2000 y con la irrupción de las cámaras digitales, el formato permitió ofrecer una calidad excepcional, con detalles impensables antes.

Y que se disfrutan en imágenes como el momento en el que una bellísima Maribel Verdú besa su Goya, los ojos brillantes, en la XXVII edición (el año de Blancanieves), o Iciar Bollaín, en un gesto maternal, acuna el suyo el año de Te doy mis ojos, la cinta que arrasó en 2004 con siete estatuillas.

O la familia Bardem, emocionados en la XVI edición (año 2002, Juan Antonio Bardem, Goya de Honor), el conmovedor beso de la actriz Verónica Forqué a su padre en 1994, durante la IX edición, o el grito de felicidad, manos y Goya en alto, de una preciosa Candela Peña, vestida de blanco, en 2006.

(Y para contener la risa) los casi adolescentes Alejandro Amenábar y Eduardo Noriega, sin corbata, acompañados del rubio melenudo que era Fele Martínez junto a una elegantísima Ana Torrent, que, por cierto, fue la única que no se llevó el Goya aquel año.

En 1996, Tesis, la ópera prima de aquel niño prodigio consiguió siete premios, entre ellos los más importantes.

Las fotos, como la propia historia que cuentan, se llenarán de vida pasada la medianoche, cuando los paneles se den la vuelta para servir de marco a la fiesta que la Academia ofrece a sus ganadores de 2015.