Bolonia descubre el color de la ilustración literaria catalana

La ciudad italiana de Bolonia (centro) descubrió hoy el color y la creatividad de la ilustración literaria catalana con dos muestras dentro de la Feria del Libro Infantil y Juvenil, como la protagonizada por Pilarín Bayés.

A la inauguración de la feria, una de las más importantes del sector a nivel internacional, acudió el presidente de la Generalitat catalana, Carles Puigdemont, que defendió en varios actos el buen estado de salud que muestra el sector editorial de comunidad autónoma.

Una de las muestras presentada fue “Cataluña ilustrada”, en la que se presentaron una serie de cincuenta láminas con obras de la ilustradora Pilarín Bayés (Vic, 1941).

La artista recorre la historia de Cataluña, desde la prehistoria hasta las actuales reivindicaciones de independencia, y lo hace con su trazo ágil y colorido, como si lo estuviera narrando a su público eterno: los más jóvenes.

La muestra, basada en el estudio de quince historiadores repartido en ocho tomos, se puede visitar en el imponente Palacio de Accursio, sede del Ayuntamiento boloñés.

A su inauguración acudió la autora y lo hizo, según explicó en una entrevista con Efe, como “abuela” de los ilustradores catalanes, aunque reconoció que le produce “un poco de susto” tener que narrar la historia de su comunidad autónoma.

Señaló que entre las láminas mostradas falta una que le gustaría realizar: la de una Cataluña independiente.

“La cultura, la gente en España, para mí son mis hermanos por familia y por convicción. Porque están cerca, los queremos mucho. Yo creo que en el fondo, lo que conviene es que la gente pueda escoger”, refirió la veterana dibujante.

Bayés comenta que, en cualquier caso, si hay una época que le ha gustado retratar particularmente, es el Medievo, sobre todo por aquel gótico catalán “austero, muy rígido y súper elegante y guapo”.

Bolonia también tiene la oportunidad de apreciar la ilustración literaria de otros diecisiete autores catalanes gracias a la exposición “Vet aquí una vegada”, en el claustro del Archiginnasio, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad.

La exposición se articula en diecisiete paneles en los que se muestra un dibujo de los autores junto a frases de los libros a cuyas páginas acompañaron y que recorren todo el porticado del claustro, recorrido además con señales en su centenario pavimento.

Quien acuda a este claustro podrá apreciar el arte de Mercé Aranega (Barcelona, 1948), escritora de libros para niños, o la cándidas figuras con las que Valentí Gubianas (Navás, 1969) envuelve al lector.

También se muestra el dibujo intimista de Fina Rifá (Palma de Mallorca, 1939), el trazo vivo de Montse Ginesta (Seva, 1952), las viñetas críticas y mordaces de Max (Barcelona, 1956) o el estilo cinematográfico de Tassies (Barbastro, 1963).

El acto se enmarca en los actos de la Feria del Libro Infantil y Juvenil de Bolonia, uno de los eventos más importantes del sector editorial internacional y que ha dedicado a Cataluña y a las Islas Baleares su 54 edición, como “huéspedes de honor”.

En su inauguración, Puigdemont destacó que esta es la primera ocasión en la que la Feria de Bolonia otorga este honor a una región “en ausencia de Estado” en vez de a un país.