Mañana y el sábado podrán circular todos los coches por Madrid, pero no aparcar

Todos los vehículos podrán circular mañana y el sábado por la almendra central de la capital pero, al menos mañana, no podrán aparcar en la zona SER ni superar los 70 kilómetros por hora, según ha anunciado hoy la concejal de Movilidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento, Inés Sabanés.

Sabanés ha explicado en rueda de prensa que según las mediciones de dióxido de nitrógeno de la medianoche pasada, el nivel de alerta vuelve a ser de preaviso, de manera que se volverá al escenario 2 de protocolo anticontaminación, que permite circular a todos los vehículos pero no aparcar en la zona SER, salvo a los residentes, y prohíbe circular a más de 70 kilómetros por hora en la M30 y los accesos a la ciudad.

Las medidas a aplicar según el protocolo se revisan diariamente en función de los niveles de medición de las distintas estaciones, de manera que mañana es seguro que se aplicará el escenario 2 -que no permite aparcar en la zona SER pero sí circular-.

Y el sábado 31, en el peor de los casos, se aplicaría también el escenario 2, aunque aún no se sabe si la situación mejorará, lo que permitiría suavizar las medidas en otros escenarios menos restrictivos.

Respecto al domingo, 1 de enero, Sabanés no ha querido aventurar cuál será la situación porque dependerá de las mediciones que se hagan hoy y mañana, pero ha remarcado que si se volviera al escenario 3 se estudiaría si se pueden hacer excepciones en la aplicación de las medidas, al menos durante unas horas, al tratarse de una jornada de operación retorno.

La concejala ha señalado que hoy, primer día en el que se ha restringido el tráfico a la mitad de los vehículos (sólo pueden circular las matrículas pares) en el interior de la M30, el tráfico está siendo fluido y los servicios de EMT y Metro funcionan “con normalidad”, con una mayor “pero asumible” afluencia de pasajeros.

Inés Sabanés no ha querido ofrecer datos sobre las sanciones que durante el día de hoy han puesto la Policía Municipal y los agentes de movilidad a los vehículos que han infringido las medidas del escenario 3 (las matrículas pares que hayan circulado con menos de 3 pasajeros o la superación de los 70 kilómetros por hora), porque a su entender esos datos desviarían la atención de lo importante, que es el cumplimiento del protocolo para garantizar la salud pública.

La edil ha insistido en que el “primer, más importante e irrenunciable” objetivo es minimizar los efectos de la contaminación en la salud de la población, y por eso ha reiterado que mientras la situación climatológica siga siendo mala, es recomendable utilizar el transporte público.

La directora general del área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Paz Valiente, ha detallado que en las mediciones de ayer una estación -Fernández Ladreda- superó los 200 microgramos de dióxido de nitrógeno durante más de dos horas y otra -Villaverde- se quedó a un microgramo de superarlo, por lo que se ha pasado del nivel de aviso al nivel de preaviso pero por muy poco. “Sigue siendo una situación seria”, ha advertido.

Por lo pronto, hoy se ha notado una reducción del tráfico en el centro de la ciudad comparado con otros días similares, y el transporte en autobús ha sido mucho más fluido, según Sabanés y Valiente.

Valiente ha especificado que se ha calculado una reducción de un 8 % de los coches entre las 7:00 y las 8:00 horas comparándolo con días equivalentes, el mismo porcentaje de reducción que se ha calculado en la M30.

Ha afirmado que también se está respetando el límite de velocidad de 70 kilómetros por hora en la M30 y en los accesos, lo que sumado a la reducción del tráfico “va a contribuir a que se tenga una mejor situación” de los niveles de contaminación.

Inés Sabanés ha admitido que con estas medidas “es verdad que no se resuelve” la contaminación “pero se contiene el problema”.

Y ante las peticiones de algunos grupos de la oposición de flexibilizar las medidas del protocolo en determinados casos, la delegada de Movilidad ha señalado que se estudiarán, pero sin que se desdibuje el objetivo primordial, que es la protección de la salud. “Entiendo que todos los grupos serán sensatos”.