Sandra Golpe: La buena imagen suma puntos en TV pero no es lo primero

Desde que en 2008 fichó por Antena 3, Sandra Golpe ha trabajado en distintos informativos de la cadena y se ha encargado de especiales y sustituciones como hará este verano, ya que suple a Susanna Griso al frente de “Espejo Público”, un reto que asume “con ilusión y humildad”.

Golpe, que estudió Periodismo en la Universidad de Navarra y también se dedica a la docencia como profesora de locución y actitud ante la cámara, reconoce en una entrevista con Efe que aprendió “casi todo” lo que sabe de televisión durante una década en la desaparecida CNN+.

“La buena imagen suma puntos, pero no es el primer atributo que se busca en un comunicador, ni muchísimo menos”, señala esta periodista nacida en San Fernando (Cádiz) y que es muy consciente de que en las próximas semanas en su programa estará presente la formación de un nuevo Ejecutivo o la investidura de un nuevo presidente del Gobierno.

PREGUNTA: Debuta como conductora de “Espejo Público”. ¿Cómo afronta este nuevo reto tras alrededor de veinte años de carrera?

RESPUESTA: Con ilusión y humildad, sé que tengo que acoplarme al formato, son muchas horas de directo que en nada se parecen a los informativos. Creceré profesionalmente, disfrutaré en lo posible de la experiencia y además estaré muy bien rodeada, porque el programa tiene un equipazo. En ese sentido me siento muy tranquila.

P: ¿Qué supone para usted reemplazar a Susanna Griso?

R: Es una profesional diez, un verdadero referente periodístico para quienes nos dedicamos a este oficio. ¡Imagina qué responsabilidad! Este verano su sustituta habitual, Esther Vaquero, dará a luz, y han pensado en mí. Agradezco mucho la confianza.

P: ¿Le ha dado Griso algún consejo especial?

R: Es muy generosa con sus compañeros. Lleva diez años conduciendo el programa y puede darme todos los consejos del mundo. Antes de que se marche de vacaciones la secuestraré un ratito, para apuntarlos. Ella es de las que se prepara a fondo las entrevistas y los temas, apuesta por el rigor y por la naturalidad ante la cámara.

P: ¿Cuáles cree que son las principales diferencias que va a encontrar entre presentar un informativo nocturno y llevar un magazine?

R: Para empezar, en Espejo...¡hay público!. Hay colaboradores con sus propios espacios de actualidad, hay tertulianos y debes medir los ritmos y tiempos de cada uno, hay espacio para la política y para todos los asuntos que son noticia a lo largo de tres horas y media diarias en directo, hay entrevistas de todo tipo. Es un mundo aparte.

En los servicios informativos, equipos y secciones trabajan todo el día para ofrecer sus respectivas coberturas. Los tiempos de cada información se respetan, son sagrados, hay poco margen para improvisar porque se trata de contar en muy poco tiempo muchas informaciones para que el espectador quede al tanto de toda la actualidad del día. Hablamos de dos conceptos diferentes de trabajo, ambos muy enriquecedores. Un privilegio para cualquier periodista.

P: ¿La situación política del país estará muy presente en el programa?

R: Por supuesto que sí, la primera parte del programa seguirá centrada en la política, que sigue muy viva y cambiante. Este verano, la verdad, pocos podrán irse de vacaciones, quedan muchos flecos pendientes después de seis meses de limbo institucional. Asistiremos a cómo se forma el nuevo Ejecutivo, a la ronda de consultas del Rey, a la investidura del presidente del Gobierno. Todo lo que suceda dentro o fuera de España, como siempre, tendrá cabida y eco en el programa.

P: ¿Qué parte de un magazine le atrae más: tertulia, conexiones directo, entrevistas, corazón?

R: Tengo ganas de probar la experiencia de la tertulia, por mi trabajo diario las conexiones en directo y las entrevistas me son más cercanas. Cada sección suma, contamos con profesionales especializados en todas las áreas. Por ejemplo, la información de sucesos está perfectamente cubierta gracias a compañeros como Alfonso Egea, Nacho Abad o Albert Castillón. Lo grande de “Espejo” es el equipo que lo compone.

P: ¿Por qué se suele elegir a una mujer para presentar los matinales?

R: No lo sé. Entiendo que no es una decisión al azar, deberíamos preguntárselo a los expertos en programación. Seguro que estudian el perfil de los espectadores de las mañanas y buscan a personas que conecten con la mayoría. De todos modos ellas nunca están solas, las arropan equipos de compañeros.

En el prime time suele pasar lo contrario, los hombres de los informativos muchas veces llevan el peso del formato, con la compañera al lado.

P: ¿Cree que a veces puede primar que una información sea contada por una 'cara bonita'?

R: De ninguna manera, creo que mi medio demanda rostros armónicos pero, sobre todo, muy profesionales. El excesivamente guapo o feo llama demasiado la atención, existe el peligro de que su mensaje quede en un segundo lugar.

Lógicamente hacemos tele y la buena imagen suma puntos, pero no es el primer atributo que se busca en un comunicador, ni muchísimo menos.

P: ¿Estará este verano muy pendiente de las audiencias?

R: Siempre lo estamos, pero sin volvernos locos. En verano las curvas bajan, no podemos pedirle peras al olmo. Lógico, una mayoría de españoles, de nuestros fieles, se marchan de vacaciones. Ahí estaremos para que, quién esté en casa por la mañana, se quede con nosotros para informarse y pasar un buen rato.

P: ¿Tiene más ventajas que inconvenientes salir en la TV o al contrario?

R: Llevo una larga temporada pasando más tiempo en la tele que en mi casa. Apenas hago vida social, se resume a planes infantiles con mi hijo y poquito más. Francamente, no percibo ventajas ni inconvenientes. Soy una vecina más en mi pueblo tricantino (Tres Cantos, Madrid).

P: ¿Prefiere trabajar de noche o de mañana?

R: Siempre con la luz del sol. Trabajé cuatro años de noche, ¡nunca mais!.