Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El ataque limitado de Israel a Irán rebaja el temor a una guerra total en Oriente Medio
El voto en Euskadi, municipio a municipio, desde 1980
Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

El australiano Warwick Thornton compite en Venecia con un “western” aborigen

El australiano Warwick Thornton compite en Venecia con un "western" aborigen

EFE

Venecia (Italia) —

0

El realizador australiano Warwick Thornton presentó hoy en la competición de la Mostra “Sweet Country” un típico “western” que lo único que aporta de novedoso es que los oprimidos de la historia son los aborígenes.

Basada en hechos reales, la historia se desarrolla en la zona central de Australia y está protagonizada por Sam Neill, Bryan Brown, Hamilton Morris, Ewen Leslie y Natassia Gorey-Furber.

“La parte oscura de nuestro país la hemos ocultado”, señaló en rueda de prensa Thronton, que consideró que no hay que olvidarse del pasado.

En “Sweet Country”, Thornton cuenta la historia de Sam (Morris), un aborigen que trabaja para un predicador (Neill), que le envía a ayudar a un nuevo vecino, Harry (Leslie) a renovar el vallado para su ganado.

Harry es un violento bebedor que se cree con derechos sobre los aborígenes y se comporta violentamente con ellos, lo que desencadena una reacción aún más violenta.

Sam Neill explicó hoy, en rueda de prensa, que le impresionó la ópera prima del director, “Samson and Delilah” (2009), por la que recibió la Cámara de Oro de Cannes y que desde entonces quería trabajar con él.

Neill, conocido por películas como “Calma total” (1989) o “El Piano” (1993), se sintió además atraído por el proyecto porque su personaje es “el único de la historia que reconoce a los aborígenes como seres humanos”.

Una historia de racismo, de explotación y de justicia que cuenta con buenas interpretaciones y unas preciosas imágenes del desierto australiano pero que no aporta nada al género del “western”.

Etiquetas
stats