Una boda en bicicleta

Juan Ramón García y Mariví Maldonado son dos apasionados de la bicicleta que han decidido llevar su afición a uno de los días más importantes de su vida, el de su boda, a la que han acudido hoy, como la mayoría de invitados, sobre un vehículo de dos ruedas.

Tanto los novios como unos 35 invitados han recorrido en bicicleta la distancia entre el lugar de residencia de la pareja en Málaga y la playa de La Cala del Moral, en Rincón de la Victoria, donde se ha celebrado la ceremonia.

Los novios son socios del colectivo Ruedas Redondas, que promociona el uso de la bicicleta, y se conocieron precisamente en una actividad de esta asociación, por lo que plantearon la idea de homenajear este vehículo durante su boda.

Maldonado ha explicado a Efe que lo que pretenden es reivindicar el valor de este transporte, que cada vez se está haciendo un hueco mayor en la sociedad, “y demostrar que también se podía incorporar a un día tan especial para nosotros como este”.

“No hace falta que todos los invitados a una boda acudan en su propio vehículo, sino que existen otras alternativas más saludables y sostenibles”, ha insistido la novia, que es maestra y que, al igual que su ya marido, emplea la bici a diario para ir a trabajar o desplazarse por su ciudad.

El improvisado pelotón nupcial ha recorrido los veinte kilómetros que separan la avenida Herrera Oria de Málaga y la playa de La Cala del Moral, y ha ido efectuando paradas en lugares como la plaza de la Marina, el puerto de Málaga, los Baños del Carmen o el Peñón del Cuervo para hacer fotografías.

De esta forma, a golpe de pedal, García y Maldonado han ido fabricándose su reportaje de boda, que, como no podía ser de otra forma, han querido hacerse sobre sus bicicletas.

El presidente de Ruedas Redondas, Alonso González, ha manifestado que no se le ocurría mejor forma de que García, que es secretario del colectivo, y Maldonado, que ocupa la vicepresidencia, celebrasen su unión.

Ha señalado que la marcha se ha desarrollado sin ningún incidente “y despacito, porque también iban niños con nosotros”.

Asimismo, ha indicado que, al paso por la barriada malagueña de El Palo, los vecinos han salido a la calle para jalear y dar ánimos a la comitiva, y nada más entrar en Rincón de la Victoria, han sido escoltados por la Policía Local, que se ha situado detrás del pelotón al grito de “vivan los novios” desde la megafonía del coche patrulla.

Ha sido la segunda boda para estos contrayentes ciclistas de más de 50 años y ha estado oficiada por el teniente de alcalde de La Cala del Moral y concejal en el Ayuntamiento de Rincón de la Victoria, Pedro Fernández Ibar.

Las bicicletas de las invitadas se han decorado con un ramo de tulipanes blancos en el manillar y la de la novia llevaba una cesta detrás en la que iba sujeta la cola de su vestido, mientras que las bicicletas de los hombres se han ornamentado con unos sombreros.

Por fortuna para los asistentes a la boda, que han tenido que pedalear bajo un sol de justicia, los novios no han pedido a sus familiares y amigos que acudan de etiqueta, por lo que la manga corta e incluso las bermudas se han impuesto entre el vestuario.