El mundo de la cultura se moviliza en favor del cineasta encarcelado Sentsov

Artistas, cineastas y otras personalidades internacionales del mundo de la cultura, entre ellos los directores de cine españoles Fernando Trueba y Jaime Rosales, hicieron hoy un llamamiento en favor de la libertad “inmediata” del realizador ucraniano Oleg Sentsov, encarcelado en Rusia.

Su manifiesto, publicado en el diario francés “Le Monde” y apoyado por más de 80 personas, subraya que es urgente y necesario que Rusia encuentre una solución humanitaria y política a la situación y que la comunidad internacional actúe para “obtener respuestas”.

Sentsov fue condenado en 2015 a 20 años de prisión por terrorismo en Crimea (la península ucraniana anexionada por Rusia en 2014) y su salud se ha deteriorado por la huelga de hambre que mantiene desde el pasado 14 de mayo para exigir la puesta en libertad de todos los presos políticos ucranianos en Rusia.

“Los artistas de todo el mundo saben que el presidente ruso (Vladímir Putin) tiene el poder de parar esta tragedia humana y democrática”, destacaron los firmantes, para quienes no hacer nada significaría “tolerar que uno puede ser matado por sus ideas, sus opiniones, su postura”.

El director estadounidense David Cronenberg, los franceses Jean-Luc Godard y Michel Hazanavicius, el mexicano Amat Escalante o el rumano Cristian Mungiu participan en esta reivindicación, apoyada también por la ministra francesa de Cultura, Françoise Nyssen.

Los firmantes destacaron que Sentsov ha perdido 30 kilos desde el inicio de su huelga de hambre.

“La libertad de expresión y de creación no debería acabarse allí donde empieza la disidencia, y, sin embargo, hoy en día un cineasta se está muriendo por ser disidente, amenazado como consecuencia de sus ideas”, destacaron.

El colectivo recalcó que la diversidad de opiniones y las discusiones que suscitan los artistas “son una suerte para la democracia, la libertad y el progreso”, y sostuvieron que no hacer nada en este caso sería renunciar a lo que defienden y a lo que son.

El director de cine, de 42 años y padre de tres hijos -uno de ellos con autismo-, tiene nacionalidad ucraniana pero es considerado por Rusia ciudadano suyo tras la anexión de Crimea, y Ucrania y Occidente le consideran un preso político.

El pasado viernes, la Unión Europea pidió a Moscú que proporcione asistencia médica al disidente cineasta ucraniano, y el presidente francés, Emmanuel Macron, transmitió Putin su preocupación sobre el estado de Sentsov y subrayó la importancia de que Rusia encuentre con urgencia una solución a la dramática situación.