Casi la mitad de los vehículos escolares controlados tenían irregularidades

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha denunciado irregularidades administrativas en 1.504 de los 3.602 vehículos de transporte escolar inspeccionados en la campaña especial de vigilancia desarrollada entre el 30 de noviembre y el 4 de diciembre.

Según informa Tráfico, las infracciones más comunes han sido las irregularidades administrativas, como no disponer de autorización especial para el transporte escolar, con 1.174 conductores sancionados, o no tener suscrito un seguro de responsabilidad ilimitado, que ha originado 256 denuncias.

Los agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil también han denunciado a cinco conductores por exceso de velocidad, otros nueve por superar el tiempo de conducción o minoración del descanso y cinco más por manipular el tacógrafo o sus elementos.

Otros ocho vehículos inspeccionados presentaban anomalías en el funcionamiento de los sistemas de retención de los pequeños.

Las deficiencias en las puertas de servicio y emergencias o en sus dispositivos de accionamiento o no llevar la señal de transporte escolar reglamentaria han supuesto un total de 139 denuncias.

Asimismo, otros 40 conductores han sido sancionados por no llevar a bordo del autocar una persona encargada del cuidado de los menores, mientras que 15 lo han sido por circular sin llevar la ITV en regla.

La Dirección General de Tráfico asegura que continuará realizando controles permanentes a este tipo de vehículos debido a su preocupación por que el transporte de menores se realice de forma segura.