La patronal Anfaco resalta que no hay fraude en las conserveras de atún

El secretario general de la patronal de fabricantes de conservas de pescado Anfaco-Cecopesca, Juan Manuel Vieites, ha declarado a Efea que hoy “no hay ningún caso” de fraude por atún adulterado en “la industria conservera, ni en la flota”.

El responsable de Anfaco-Cecopesca ha reaccionado así a la confirmación por parte del Ministerio de Sanidad de la intoxicación de 154 personas en 2017 en varias autonomías y en otros países europeos, por consumir atún en malas condiciones.

Vieites ha manifestado que los casos de fraude “se deben a las malas praxis” y al “manejo irresponsable” de unos pocos operadores, como el añadido de aditivos o extracto de remolacha para que el pescado parezca más fresco y venderlo a un precio más caro.

“Las conserveras españolas son completamente ajenas a esta alarma, en nuestra industria tendrá un impacto cero”, según el secretario general de Anfaco.

Ha recalcado que el atún es el primer producto pesquero de exportación nacional y que sus industrias tienen todos los procesos “muy controlados”.

También ha subrayado que las inspecciones están funcionando, así como los seguimientos por parte de los ministerios de Sanidad y de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.

Ha confirmado que los inspectores veterinarios de la Comisión Europea (CE) visitarán España en la tercera semana de octubre y que las industrias “están preparadas” para cualquier control.

Ha rechazado que en la alerta por estas intoxicaciones “se meta a todo el sector en el mismo saco” y, en este sentido, ha opinado que se están “mezclando” informaciones sobre asuntos diferentes, como la presencia de histamina por la cadena de frío, el uso ilegal de extracto de remolacha o las denuncias contra operadores que comercializan como rojo otras clases de atunes.

Por otra parte, ha explicado que también han aparecido informaciones sobre la legislación que establece que cuando un barco pesca un atún deberá congelarlo a -9 grados, por lo menos, para poder utilizarse posteriormente en conserva y a -18 grados para otros usos.

Según Vieites, se están buscando estudios para demostrar que pueden cambiarse esos requisitos, pero por ahora esas son las normas.