Tricicle “frenará” su paso por los escenarios, pero “no cerrará la persiana”

Tricicle lleva años diciendo que deja los escenarios, por eso no hay que fiarse de que “Hits”, el espectáculo con el que recalan hoy en Madrid en su gira “de despedida”, sea el último porque después igual se aburren “en casa” o deciden “engañar” a sus seguidores para regresar con un “cambio de registro”.

La retirada de Tricicle de las tablas es hoy día todo un misterio que podría catalogarse como comedia de intrigas o como un “skecth” humorístico más de los que la compañía -formada por Carles Sans (1955), Paco Mir (1957) y Joan Gràcia (1957)- representa desde hace 38 años, ya que, según explican en una entrevista con Efe, el trío “no desaparecerá”.

“Es probable que frenemos lo que es ir de gira y actuar, al menos esta es nuestra idea en estos momentos, pero Tricicle no cerrará la persiana”, asegura Sans, que apunta que tienen muchas ideas para continuar vinculados al mundo del teatro sin dedicarse a la interpretación.

Sin embargo, aunque su “jubilación” como actores se intuye cercana por los anuncios que la compañía ha hecho a los medios de comunicación en los últimos años y por el “desgaste” que producen las casi dos décadas de actuaciones, no hay que fiarse de que los catalanes digan adiós con la que -curiosamente- arrancó como su gira “de despedida”.

“Hits” es el título de ese espectáculo que recopila “lo mejor de lo mejor de lo mejor de Tricicle” y que, estrenado en septiembre de 2016, nació con el propósito de representarse en una “tremenda gira” que acabaría en 2020 con la celebración de los cuarenta años del trío.

Sin embargo, después de recorrer muchas ciudades españolas, de hacer ahora una parada en Madrid hasta enero de 2018 y de continuar durante dos años más con esa selección de sus mejores gags y sketches, los actores no dejan claro qué vendrá después.

“Ya veremos lo que hacemos. Igual engañamos a todo el mundo y hacemos un nuevo espectáculo de creación como 'Bits', a lo mejor seguimos toda la vida haciendo 'Hits' o nos hacemos matriceros o torneros fresadores”, bromea Mir.

Tienen muy claro que de los escenarios no están cansados porque, en palabras de Gràcia, es “maravilloso” ver cómo sus seguidores les pide al salir del teatro que no se retiren, aunque admite que lo que sí cansan son los años de “autopistas, trenes y aviones”.

A eso añaden una inquietud compartida por dirigir, producir y hacer todo lo que el intenso ritmo de las actuaciones no les ha permitido hacer. Entre esas ideas se encuentran la de crear nuevas compañías que sigan la línea que ellos han marcado o, incluso, crear “Tricicle femenino”.

“En cualquier caso, como Tricicle no desapareceremos y, si algún día nos aburrimos muchísimo en casa y nuestras mujeres ya no nos soportan más, igual nos vemos en la obligación de pisar otra vez el escenario. Yo qué sé”, precisa Sans.

Recalcan en varias ocasiones que no se cierran “a nada” y subrayan que lo que más los une en este momento es su interés por el teatro más allá del escenario y sus ganas de “hacer bien la función a la hora de la función”, ya que, fuera del grupo “cada uno tiene su vida y sus aficiones”.

La única “espinita” clavada en unos “payasos” que han hecho mucho teatro, pero también series, publicidad o radio es, dicen, no haber hecho más cine después de “Palace” (1995) porque, según apunta Gràcia, su base siempre ha sido “más cinematográfica que teatral”.

“Yo añadiría que fuimos unos adelantados en esto del cine porque hicimos una película muda en un momento en el que quizá no se entendió que al cine se le podía volver a llevar a una película muda”, explica Sans en referencia a la oscarizada “The artist” (2011) y a la ganadora de una decena de premios Goya, “Blancanieves” (2012).

Como nunca es tarde y como, lejos de estar “cerrados a nada” están “abiertos a todo”, Tricicle puede continuar su camino de muchos modos.

Además, lo más difícil ya lo han hecho porque hacer reír una única vez, señala Mir, es “fácil”, pero “hacer reír trescientas o cuatrocientas veces”, como hacen ellos desde 1979, es algo “muy complicado”.