Adiós a las fiestas machistas
Ya es algo habitual que en las listas de éxitos aparezcan canciones con un claro mensaje machista. Bien por el uso de un lenguaje vejatorio, por estereotipar y cosificar a la mujer o por idealizar una visión del amor romántico en el que los personajes femeninos son sumisos, hay canciones que distan notablemente del concepto de igualdad.
La música, la literatura o la pintura no son machistas, pero otra cosa es la utilización que hacemos de ellas. “Bailar no implica que esté pidiendo sexo”, recuerda una mujer en un vídeo contra las agresiones sexistas en las fiestas. En concreto, se trata del vídeo de la Tomatina de Bunyol, que clama por unas fiestas sin machismo, homofobia, transfobia y racismo. Por unas fiestas libres y seguras.
Son muchos municipios valencianos que se han acogido a estas iniciativas. Prácticamente todo aquel que cuenta con un departamento de Igualdad ha puesto a trabajar su maquinaria para promover mensajes igualitarios y protocolos contra agresiones. Bellreguard y Riba-roja condicionan las subvenciones a los organizadores a que no compartan mensajes machistas vía música o carteles, Paterna ha colocado carpas con el lema 'No es no', mismo eslogan que han difundido en mochilas que reparten en los puntos de mayor afluencia.
Otros, como el de Cullera, han ido más allá y suprimieron una vez empezado una 'batalla de gallos' -duelo de rap con rimas improvisadas- porque los vecinos denunciaron un lenguaje violento. Una decisión no exenta de críticas, no solo por parte de los amantes del género, sino por otras personas que consideran que censurar no es una solución. En Xàbia el ayuntamiento se disculpó por un espectáculo de 'twerking' que molestó a colectivos feministas y que provocó la misma reacción que en Cullera.
Sin llegar al punto de la prohibición, otros departamentos abogan por el mensaje en positivo: las recomendaciones. Siguiendo la iniciativa del Insituto Vasco de la Mujer, hay ayuntamientos que promueven canciones con mensajes feministas. La lista de reproducción de la entidad vasca, con cerca de 300 canciones, se puede consultar bajo estas líneas. El Institut Valencià de la Dona trabaja en una especie de código de buenas prácticas para que todos los municipios creen su propio protocolo de prevención de la violencia de género, con una serie de mensajes por la igualdad y campañas de concienciación de la población para evitar y denunciar las agresiones. Según su directora, María Such, se está aumentando la vigilancia en los eventos con aglomeraciones y de la promoción de las fiestas patronales, buscando soportes que “traten la imagen de la mujer con dignidad”.
El colectivo Alerta Feminista lanzó en julio la campaña Tengamos la fiesta en paz, con material para distribuir por redes sociales y en soporte físico en los distintos eventos que se celebran en los municipios y que condenan las agresiones sexistas y el acoso. Mensajes como “beber en exceso no te disculpa”, “mi cuerpo no es tu derecho” o “yo tengo derecho a enseñar el culo, tú no tienes derecho a tocarmelo” son los que conforman este bando feminista. La campaña también incluye una moción a los ayuntamientos para exigir que estos adopten medidas contundentes para prevenir y, en caso de producirse, perseguir las agresiones machistas, así como hacer participes de estas medidas a las comisiones festivas. El objetivo: unas fiestas libres de machismo.
