El PSPV se alinea con la derecha para derogar el segundo médico en los 'bous al carrer' y Compromís aún se plantea su postura

Las Corts Valencianes derogarán la disposición de la ley de espectáculos que obliga a que estén presentes dos médicos en los festejos de los 'bous al carrer'. La disposición legal no ha llegado a entrar en vigor pese a aprobarse en el parlamento autonómico. La misma cámara acordó, con el acuerdo de PSPV y Compromís y el apoyo de Ciudadanos establecer una moratoria para que la norma no fuera de obligado cumplimiento hasta enero de 2020.

En el pleno de las Corts Valencianes que comienza este miércoles se debatirá la propuesta, planteada por el PP, que adapta una proposición de las mismas características presentada por el PSPV antes de que finalizara la anterior legislatura. Según explican los socialistas, al ser un “calco”, su posición sigue siendo la misma. La propuesta contará con el apoyo de Ciudadanos, que así lo manifestó en la comisión taurina y de Vox. El grupo parlamentario de Compromís señala que tendrá que decidir su postura en una reunión previa al pleno. Sólo Unides Podem se muestra contrario a eliminar el segundo médico por “coherencia” con su trabajo legislativo, según explica Irene Gómez, diputada de esta formación. La parlamentaria considera la derogación una “temeridad e irresponsabilidad” y señala que en Aragón se llegó a los tribunales, que finalmente determinaron que en los festejos debe haber un médico y técnico ayudante.

La derogación, expone el PP, se fundamenta en que la disposición adicional “prevé un contenido imposible de cumplir” dados los plazos, el número de festejos y de facultativos en la Comunitat Valenciana. “Las exigencias introducidas pueden acabar dificultando en la práctica la celebración de los festejos”, apunta el texto, que los califica como un acontecimiento que necesita de la “protección y apoyo” de las administraciones públicas, dado el “gran valor que poseen”.

La Ley de Acompañamiento a los presupuestos, aprobada en diciembre de 2017, incluyó a instancias de Podemos y con el apoyo de los socialistas y de los valencianistas una modificación del reglamento para incluir la presencia de dos facultativos. La medida buscaba, según el planteamiento, aumentar la seguridad en unos festejos que se han cobrado la vida de 16 personas en los últimos cinco años y que arrastran más de 3.500 heridos desde 2015. 

El PP y los sectores taurinos, incluyendo a peñas, ganaderos y alcaldes, clamaron contra la medida, aduciendo que implicaba de facto un ataque a la fiesta. Los organizadores de los festejos taurinos consideran que con este requisito los costes se hacen inasumibles para muchos ayuntamientos, especialmente los de los municipios más pequeños.

Desde que se acordara la moratoria de dos años, en febrero de 2018, los sectores taurinos han ido presionando a los partidos políticos para deshacer la medida, tanto a través de la Comisión Técnica de Bous al Carrer, que integra a la Administración pública, como a través de los representantes de las ganaderías. 

Por su parte, el colegio de médicos de Castellón manifestó a través de un comunicado que “su presencia en los recintos es precisa para garantizar la seguridad asistencial de los participantes en estos espectáculos”, además de recordar que “la ley estatal recoge la obligatoriedad de que sean dos facultativos quienes atiendan la enfermería”.

Según los últimos datos presentados por la Comisión Consultiva de Festejos Tradicionales, en la que está representada la Agencia de Emergencias, esta temporada han fallecido cinco personas y otras 285 han resultado heridas, 13 de ellas de gravedad, en los 7.600 festejos taurinos en la Comunitat Valenciana.