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“Mujeres sin cuota”: así reta el PP valenciano a las feministas

Un acto del PP de Castellón reivindicando a sus mujeres en política

Laura Martínez

“Somos el partido con más mujeres candidatas, porque lo valen, sin necesidad de cuotas”. La afirmación es de Miguel Barrachina, presidente del PP de Castellón. Los conservadores valencianos tratan de subirse, a su manera, a la ola feminista en auge desde el pasado 8 de marzo. Y lo van haciendo en actos en los que, a su manera, reivindican la presencia femenina en las primeras líneas del partido.

El partido, dice su secretaria general castellonense, Elena Vicente-Ruiz, apuesta por “las mujeres sin cuotas, por las que defendemos la igualdad y el talento, no en las imposiciones, sino en la libertad”. El pasado domingo, en un acto en Castellón con la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, las populares reivindicaron su liderazgo “sin necesidad de cuotas”.

“En el PP las mujeres que ostentan cargos lo están por su validez, por su valentía y honradez, por su talento, no porque haya una cuota que obligue a ello”, insistió Elena Vicente-Ruiz, insinuando que en el resto de partidos no debe ser así. Los conservadores valencianos se vanaglorian de ser el partido que más mujeres candidatas o en puestos institucionales tiene. La dirigente puso varios ejemplos de la provincia como Begoña Carrasco, candidata del PP a la ciudad de Castellón; Carmina Ballester, candidata por Onda; Carolina Castelló, alcaldable por la Vall d'Uixó; María Tormo, ídem por Almassora o Mari Luz Monterde por Benassal. Tras el discurso, lanzaron la etiqueta #MujeresSinCuotas en twitter como reivindicación.

El debate de las cuotas de género en los puestos directivos o en los partidos políticos viene de largo en el movimiento feminista. De una parte, se considera que es reparar una discriminación histórica; de otra, que es contraproducente porque genera rechazo. En cualquier caso, desde la reforma electoral de 2006 es obligatorio que ningún sexo esté representado por debajo del 40% en el total de las listas; es decir, es obligatorio que sean paritarias. En la modificación de la ley electoral que se debate en las Corts Valencianes los grupos progresistas coinciden en que las listas deben ser 'cremallera', alternando hombre y mujer en cada puesto para que estas no caigan a los últimos puestos.

A la portavoz popular nunca le han gustado las cuotas y le ha costado bastante definirse como feminista, hasta que el pasado 8 de marzo Isabel Bonig afirmó: “Desde el PP defendemos un feminismo no radical para lograr la igualdad real entre mujeres y hombres. La mejor lucha por la igualdad es crear empleo para las mujeres y reducir la brecha salarial”. Lo dijo el día de la huelga feminista que ni su grupo, ni el de Ciudadanos, decidieron secundar. “Las dos únicas portavoces de grupos parlamentarios estamos hoy trabajando porque todo lo que hemos conseguido ha sido a base de trabajo, esfuerzo, capacidad y mérito”, explicó Bonig.

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