La líder del PP valenciano declarará como testigo por las irregularidades en la visita del Papa el próximo 21 de noviembre
Ya se conoce la fecha en la que la líder del PP valenciano, Isabel Bonig, deberá comparecer como testigo en la causa por las irregularidades con motivo de la visita del Papa Benedicto XVI a Valencia en julio de 2006 -la magistrada ya pidió localizar a Bonig y otros testigos del caso el pasado mes de junio-. Será el próximo 21 de noviembre a las 9 horas, y la síndica popular en las Corts deberá aclarar la condonación de más de 500.000 euros a la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias en su época como consellera de Infraestructuras.
Tal y como ha avanzado Valencia Plaza, la jueza ha previsto declaraciones entre 19 de noviembre y 12 de diciembre y en la lista de testigos se encuentran también, entre otros, el expresidente de la Diputación de Valencia, Fernando Giner; el exalcalde de Moncada y exvicepresidente de la Diputación de Valencia, Juan José Medina; el exdiputado autonómico y exconcejal de Valencia, Miquel Domínguez.
Petición de la Fiscalía
La citación se produce después de que el pasado mes de mayo la Fiscalía lo solicitara a la titular del juzgado de Instrucción número 5 de Valencia para aclarar por qué se habría librado la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias de pagar en 2014 una deuda de 519.011 euros a la empresa pública Vaersa, de la que era precisamente consejera delegada Bonig.
La alerta sobre la situación se señalaba en el correo que envió en 2007 el entonces director de Vaersa, Felipe Espinosa, a quien era la secretaria autonómica, María Ángeles Ureña. En él se advertía de que había 850.000 euros “pendientes de pago”, de los cuales más de medio millón estaban facturados a la Fundación, y otros 330.000 que “no se han facturado a nadie”.
El Consell que presidía Alberto Fabra aprobó el 5 de marzo de 2014 que la Generalitat se subrogara en la deuda de más de medio millón de euros que la Fundación tenía con Vaersa; a continuación Vaersa aceptó la subrogación, liberó de la obligación de pago a la Fundación y consintió su liquidación. Finalmente la Generalitat habría saldado la deuda con Vaersa mediante una modificación de crédito.
