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Los residuos que generan los valencianos todavía no se transforman en compost

Un momento de las jornada sobre la recogida selectiva de residuos en la Conselleria de Medio Ambiente.

Adolf Beltran

“La Comunidad Valenciana no produce compost, que es solo lo que se consigue de una recogida selectiva en origen”, ha advertido la consellera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, Elena Cebrián. Y el director general de Cambio Climático y Calidad Ambiental, Joan Piquer, ha insistido: “El compost es el resultado del tratamiento de residuos biodegradables recogidos separadamente. No de residuos mezclados convertidos en material bioestabilizado, que es lo que mayoritariamente producimos en la Comunidad Valenciana”.

Esta advertencia ha sido el punto de partida de una jornada, a la que han asistido este jueves representantes de más de un centenar de municipios valencianos, en la que la Generalitat ha anunciado un impulso decidido a medidas de separación y recogida selectiva acordes a los estándares europeos, como el quinto contenedor o la recogida puerta a puerta, con la intención de lograr “un reciclaje de alta calidad”.

Piquer ha repasado la normativa existente, como el Plan Estatal Marco de Gestión de Residuos (Pemar), vigente hasta 2022, para recordar que mientras el quinto contenedor (dedicado exclusivamente a restos orgánicos, de jardinería y comida de hogares y restaurantes, por ejemplo) genera un 12% de impropios, el sistema de separación húmedo-seco (en el que va a parar a un mismo contenedor todo el rechazo tras separar el papel y cartón, el vidrio y los envases) causa un 37% de impropios. El director general ha añadido que están previstas medidas de incentivo económico y fiscales, así como cánones para quienes empleen otros métodos, que permitan aplicar “una fiscalidad progresiva a la gestión de residuos mediante recogida selectiva”.

En ese mismo sentido, la consellera ha hablado de “canalizar ayudas a esos proyectos” y de “facilitar el acceso a fondos europeos relacionados con el medio ambiente y el desarrollo rural”. Cebrián se ha dado un plazo de tres a cuatro años para poder evualar los datos y los resultados de esta política. Y Piquer ha situado en el horizonte de 2020 el objetivo de que los bioresiduos tratados de esta forma representen en conjunto el 50% del peso total de los desechos.

La explicación de experiencias concretas en la línea propugnada es uno de los aspectos centrales de las jornadas. Piquer ha citado, en referencia a ayutamientos valencianos que están ensayando en la separación en origen, casos como el de Càlig, donde se ha implantado el quinto contenedor, o la agrupación de municipios de Els Ports-Alt Maestrat, donde se preparan a hacerlo. Una posibilidad que también estudia Sagunto. Por otro lado, en Pedreguer se apuesta por el sistema puerta a puerta, un método que también se estudia en Sax.

La directora general de Prevención de Incendios, Delia Álvarez, ha anunciado la redacción de un “plan de aprovechamiento estratégico de la biomasa”, así como la orientación prioritaria de los Planes de Desarrollo Rural-Feader a “incentivar la revisión de los planes locales de prevención de incendios” y a “sustituir los planes de quemas agrícolas por otros que pongan en valor los resíduos”.

Maite Chàfer, directora general de Desarrollo Rural, por su parte, ha abogado por un “aprovechamiento de bajo coste” de los residuos orgánicos para la agricutura y ha considerado “un tema pendiente” disponer de “un compost de calidad adecuada para fertilizar los suelos sin contaminarlos, gracias a la recogida selectiva”.

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