La capitana del Sea Watch acude a declarar a un tribunal italiano: “Espero que la UE actúe para evitar estas situaciones”

La capitana del barco de la ONG Sea Watch, la alemana Carola Rackete, ha pedido a la Comisión Europea que haga lo posible para que se eviten situaciones como la que ha vivido ella y se acepten a los migrantes salvados por barcos de las ONG, tras ser interrogada por la fiscalía de Agrigento, en Sicilia.

Rackete ha acudido al Tribunal de Agrigento donde ha sido interrogada durante cerca de cuatro horas en el ámbito de la investigación a la que está siendo sometida por los presuntos delitos de “favorecer la inmigración clandestina” y entrar sin permiso en aguas italianas.

A la salida del tribunal, la activista alemana ha afirmado que estaba muy contenta por haber tenido la posibilidad de explicar todos los detalles del rescate del 12 de junio. Rackete fue arrestada el 28 de junio tras entrar sin autorización en el puerto de la isla de Lampedusa para poder desembarcar a los 40 migrantes que llevaba a bordo desde hace 17 días sin que se ofreciera una solución, tras lo que declaró el estado de necesidad en el barco.

“Espero que la Comisión Europea después de las elecciones del nuevo Parlamento haga lo posible para evitar estas situaciones y que todos los países europeos acepten en el futuro a las personas salvadas por las naves civiles”, ha dicho Rackete en una declaración a los medios en inglés y alemán a la salida del tribunal.

Uno de los abogados de la activista, Alessandro Gamberini, ha explicado que fue un interrogatorio de lo más “sencillo” donde se presentó toda la documentación y diarios de a bordo, de la declaración del estado de necesidad que forzó a la capitana a entrar en Lampedusa.

Gamberini ha reiterado que “se trató de un normal salvamento en el mar y totalmente legal y ante las exigencias dramáticas que en estos casos suceden”. El abogado ha confirmado que la joven activista de 31 años es libre de dejar el país y volver a Alemania.

La fiscalía de Agrigento ha recurrido este miércoles el fallo de la juez Alessandra Vella que decidió el pasado 2 de julio no convalidar el arresto de Rackete y dejarla en libertad.

Tras el interrogatorio, continuarán las investigaciones sobre la capitana por los presuntos delitos de “favorecer la inmigración clandestina” y entrar sin permiso en aguas italianas, así como de violencia contra nave de guerra al haber chocado contra una lancha de la Guardia de Finanzas italiana durante la maniobra de atraque.

El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, promovió un decreto ley en el que se prohíbe a los barcos de las ONG entrar en aguas territoriales si han salvado a migrantes y que prevé multa con penas de hasta 50.000 euros.

Expertos en derechos humanos de la ONU han emitido este jueves un comunicado en el que expresaron su grave preocupación por la detención y los procedimientos penales en Italia contra la capitana del Sea-Watch 3. “Salvar a los migrantes en peligro en el mar no es un delito”, añaden los expertos que instaron a las autoridades italianas “a que pongan fin de inmediato a la criminalización de las operaciones de búsqueda y rescate”.

También se ha manifestado Amnistía Internacional, que sostiene en una nota que “los cargos infundados presentados contra esta mujer valiente y de principios ponen de manifiesto la determinación de las autoridades italianas de intimidar y estigmatizar a quienes salvan vidas en el mar”.