La CE recomienda cerrar el procedimiento de déficit excesivo a Francia

La Comisión Europea (CE) propuso hoy en sus recomendaciones económicas por países cerrar el procedimiento de déficit excesivo a Francia, de modo que si los Estados miembros de la Unión Europea dan luz verde a esa iniciativa, España será el único país de los Veintiocho inmerso en ese proceso.

“Es un momento importante para Francia. Es el fin de nueve largos años de procedimiento, un procedimiento que es doloroso, de esfuerzos presupuestarios que nunca son fáciles de imponer y soportar, pero que son necesarios”, declaró el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, durante una rueda de prensa para presentar las recomendaciones de Bruselas.

El Pacto de Estabilidad y Crecimiento obliga a los Estados miembros a situar su déficit público por debajo del 3 % del PIB y Francia lo ubicó el año pasado en el 2,6 %.

Según Moscovici, la trayectoria de reducción de ese indicador en la economía gala es “fuerte y clara”, y se mostró convencido de que el porcentaje será inferior al 3 % también en 2018 y 2019.

Si en 2011 veinticuatro países tenían procedimientos abiertos por déficit excesivo, cuando el Consejo de la Unión (los Estados miembros) apruebe la recomendación del Ejecutivo comunitario solo España seguirá bajo ese proceso.

Por otro lado, Bruselas emitió una advertencia a Hungría y Rumanía por la existencia de “una desviación significativa” en los objetivos de reducción de déficit.

Bucarest se encuentra en la actualidad en el brazo preventivo del Pacto de Estabilidad y Crecimiento y el Gobierno rumano espera un déficit nominal del 2,95 % este año y una reducción gradual hasta alcanzar el 1,45 % en 2021.

Sin embargo, la CE recalcó que el objetivo de medio plazo de situar el déficit estructural en el 1 % del PIB no se alcanzará para 2021, sino que se posicionará en el 2,1 %.

Así, el Ejecutivo comunitario propuso a los Estados miembros emitir una decisión en la que se evidencie la falta de efectividad de las medidas adoptadas por Bucarest, así como recomendaciones con el objetivo de que Rumanía tome medidas en 2018 y 2019 para “corregir la desviación significativa”.

En cuanto a Hungría, en 2016 el Consejo recomendó a Budapest conseguir un ajuste fiscal anual del 0,6 % del PIB durante el año pasado, pero como se ha desviado de esa cifra, Bruselas emitió este miércoles su advertencia.

El Ejecutivo comunitario también evaluó las deudas públicas de Bélgica e Italia, dos de los países cuyos sectores públicos deben más dinero con respecto al PIB en la Unión Europea, pero decidió no emitir advertencias al respecto.

No obstante, Bruselas revisará el próximo año el cumplimiento por parte de ambos socios del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que insta a que la deuda pública no supere el 60 % del producto interior bruto.

En términos generales, la CE llamó a los Veintiocho a “fortalecer las bases para un crecimiento sostenible e inclusivo en el largo plazo”.

Así, instó a proseguir con reformas estructurales destinadas a mejorar el entorno empresarial y las condiciones para las inversiones, sobre todo mediante modificaciones en los mercados de productos y servicios, innovación, mejor acceso de las pymes a la financiación y lucha contra la corrupción.

Además, pidió a los países “fortalecer su resistencia económica” ante desafíos como el envejecimiento de la población, la inmigración y el cambio climático.

También se planteó a los Gobiernos llevar a cabo reformas que preparen a la mano de obra para la digitalización y las futuras formas de empleo.