La Conferencia Episcopal anima a marcar su casilla en la declaración de la renta

La Conferencia Episcopal Española (CEE) anima a los contribuyentes católicos y a los que aprecian la labor de la Iglesia a marcar su casilla en la declaración de la renta y para ello ha puesto en marcha la campaña “La Iglesia con todos; por una sociedad mejor”.

Según ha informado hoy la CEE en un comunicado, desde mediados del pasado mes los anuncios publicitarios se vienen emitiendo como cuñas radiofónicas y desde el lunes pasado y hasta el próximo 29 de junio pueden verse en prensa, televisión, medios digitales, vallas publicitarias y redes sociales.

El anuncio anima a marcar la casilla para el sostenimiento de la Iglesia porque es un “gesto sencillo” que no supone a nadie pagar más impuestos, ni recibir menos en la devolución.

“No cuesta nada y, sin embargo, rinde mucho, porque con él se contribuye a que la Iglesia pueda seguir trabajando, con todos, por una sociedad mejor”, subraya la CEE.

También subraya el hecho de que si se marcan las dos casillas -para la Iglesia y para otros fines sociales- se adjudica un 0,7 por ciento del IRPF a cada sector.

Al igual que otros años, se ha lanzado también una publicación con formato de periódico (“X Tantos”) en el que hay noticias, artículos de opinión y reportajes en torno al sostenimiento económico de la Iglesia.

La campaña de este año gira en torno a “X Tantos”, una marca que identifica todas las acciones que se llevan a cabo dentro del programa de sostenimiento económico y que la Iglesia utiliza desde hace tiempo para destacar la labor que realiza en colegios, hospitales, comedores sociales, hospicios o residencias de ancianos.

En la última declaración de la renta, de 2012, correspondiente al IRPF de 2011, un total de 7.357.037 declaraciones fueron a favor de la Iglesia, lo que supone que la cantidad total recaudada fue de 247,1 millones de euros.

La CEE señala que teniendo en cuenta que el 23,24 por ciento de las declaraciones son conjuntas, se puede estimar que en torno a 9,1 millones de declarantes asignaron a favor de la Iglesia, un millón más de los que asignaban en el año 2007.