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Díaz Ferrán acumula causas por delitos castigados con decenas de años de prisión

El expresidente de la patronal Gerardo Díaz Ferrán. EFE

Carlos Fonseca

Madrid —

El que fuera presidente de los empresarios españoles, Gerardo Díaz Ferrán, ha sumado su segunda condena mercantil por la quiebra del Grupo Marsans, que le obliga a pagar, junto a sus socios, el ‘agujero’ que quede tras restar de los 400 millones de euros de deuda la cantidad que se obtenga de la liquidación de la compañía. El expresidentes de la CEOE ya fue condenado el pasado mes de mayo a pagar otros 12 millones de euros por la quiebra de Seguros Mercurio, por la que también fue inhabilitado otros quince años. Sin embargo, Ferrán se juega su permanencia en prisión en cuatro causas que tiene abiertas en la Audiencia Nacional y los juzgados de instrucción.

Díaz Ferrán está acusado de un posible delito de blanqueo de capitales, alzamiento de bienes y apropiación indebida en el procedimiento abierto por el magistrado Eloy Velasco tras la quiebra fraudulenta del Grupo Marsans. El empresario y su socio, Gonzalo Pascual, ya fallecido, ocultaron de manera irregular la situación real de la empresa, que atravesaba dificultades desde 2008, para vaciarla antes de recurrir al concurso de acreedores en junio de 2010. Para entonces, los acusados ya habían alzado los bienes de la compañía, que habrían situado en paraísos fiscales para no hacer frente a sus deudas.

Ferrán fue detenido y encarcelado por esta causa el pasado 3 de diciembre de 2012, en la conocida como ‘Operación Crucero’, acusado de los delitos de blanqueo de capitales, alzamiento y ocultación de bienes. El juez está pendiente de recibir la documentación solicitada por comisión rogatoria a los paraísos fiscales de Chipre, Panamá y Suiza para conocer si dispone de patrimonio fuera de nuestro país.

Otro magistrado de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz tiene abierto otro procedimiento contra el empresario y su socio Gonzalo Pascual por la presunta apropiación indebida de 4,4 millones de euros de clientes que habían reservado viajes de vacaciones posteriormente cancelados, cuyos importes no se les devolvió.

El tercer sumario abierto en los juzgados centrales es por la compra de Aerolíneas Argentinas en 2002 (pagó un euro al Estado a cambio de hacerse cargo de una deuda de 300 millones de euros), en el que está acusado de un posible delito fiscal. La vista de esta causa se celebrará a finales de este mes de junio. Air Comet, la compañía del Grupo Marsans que hizo la compra, estuvo ocho meses sin pagar a sus trabajadores y dejó en tierra a miles de pasajeros que habían comprado sus billetes de avión.

En los juzgados de instrucción de Madrid, Ferrán está imputado por la concesión de un crédito de 26 millones de euros por parte de Caja Madrid, de cuyo consejo de administración formaba parte. Ante la imposibilidad de devolver el importe al vencimiento la caja lo renegoció para demorar el pago, pese a estar prohibido cuando los beneficiarios son los propios consejeros. En esta causa está imputado también el que fuera presidente de la caja, Miguel Blesa, actualmente en prisión.

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