Directora de red de Vodafone España: No hemos tenido miedo, pero sí presión

El uso del teléfono e internet se ha disparado, el cliente es “más sensible” y, hasta ahora, nunca habían funcionado todos los equipos en remoto a la vez, afirma a EFE la directora de Red de Vodafone España, Julia Velasco, que lo describe así: “miedo no te diría que hemos tenido”, pero sí “presión”.

Velasco está al frente de un equipo de 200 ingenieros que velan por la red de Vodafone España, una infraestructura que en estos días de confinamiento por la Covid-19 está siendo más imprescindible y estratégica que nunca.

Trabaja desde casa, al igual que toda la plantilla de la empresa, salvo los técnicos que tienen que salir a atender “algún problema de servicio puntual”. “Lo hacen siempre que estén agotados todos los chequeos previos que se hacen en remoto”, explica.

Dadas las circunstancias, “obviamente hay presión, pero estamos en un momento de aprendizaje muy rápido”, afirma Velasco en una entrevista telefónica con Efe desde la cocina de su casa, donde se ha “refugiado” para no interferir en la actividad de su marido, que también teletrabaja, o en la de sus dos hijos, que están siguiendo sus clases en remoto y con los que convive en un piso en Madrid.

Matemática de formación, se preocupa por que funcione la red correctamente, velando especialmente por aquellos lugares donde no están acostumbrados a concentrar tantos usuarios.

Aunque a día de hoy “no se puede decir que haya un punto especialmente caliente”, se han reforzado las redes en ciudades como Madrid, en las que se produce mucha concentración de población y donde se registra un mayor consumo.

En lugares como Ifema de Madrid, donde se ha instalado un hospital de campaña, se ha reforzado también la infraestructura, al igual que se ha hecho en otros puntos del país, donde se han ido habilitando espacios sanitarios de este tipo, y donde se han tenido que desplazar instalaciones móviles para extender la cobertura.

“Miedo no te diría que hemos tenido, pero es verdad que los primeros días vimos un crecimiento de tráfico por encima de lo que preveíamos”, reconoce la directiva, que explica que se registró “alguna situación muy puntual de algo de congestión, pero la red tiene capacidad de autogestionarse y no hubo problemas”.

Frente a la explosión inicial del tráfico en la red durante los primeros días de confinamiento tras decretarse el estado de alarma, el consumo se ha estabilizado, aunque “se mantiene en un escalón por encima de lo habitual”, teniendo en cuenta que el teletrabajo continúa y que sigue siendo alta la demanda de servicios de entretenimiento.

En los primeros días, aumentó especialmente el número de llamadas de voz, mientras que ahora, aunque se han reducido en parte, siguen siendo de más larga duración que antes de la Covid-19.

La comunicación con otros operadores “está siendo fluida” y todos ellos hicieron un llamamiento a la población para un uso responsable de la red: “Nadie quería llegar a una situación en la que algún servicio tuviera que dejar de usarse”.

En este contexto, la respuesta de los proveedores de contenidos ha sido buena y empresas como Netflix, Youtube, Amazon y Facebook han hecho ajustes en la codificación de sus emisiones para que el volumen de tráfico sea un poco menor.

“Han sido semanas muy intensas”, pero la red de infraestructuras de telecomunicaciones es “muy buena”. “Creo que no éramos conscientes de la situación de ventaja que teníamos en España en comparación con otros países”.

Velasco, que también es responsable de la ingeniería de red de datos móviles para Europa, destaca la colaboración entre equipos a nivel internacional. “Hemos aprendido de Italia, que pasaron por una situación similar antes, y España está siendo ahora una fuente muy grande de información importante en otros mercados”.

Pese a hacerlo desde la distancia, su trabajo no se ha detenido un momento y, aunque al principio fue más complicado, ahora la situación se ha normalizado.

En su día a día, intenta seguir una rutina “más o menos normal”, compaginando el trabajo y la familia, las pausas sincronizadas con los suyos con las videoconferencias con su equipo.

Con el teletrabajo, “se ha tenido que aceptar que los niños interrumpan las reuniones de equipo un momento. No pasa nada”.

“Dentro del momento dramático que se está viviendo”, se puede decir que a nivel profesional esta situación “ha supuesto un empuje en la innovación para encontrar nuevas formas de trabajar y apostar por soluciones más arriesgadas”.

“Después de todo esto no vamos a ser iguales, ni como personas, ni como organización, ni como equipo”, concluye.

Belén Molleda