Falciani lamenta el cierre de las investigaciones en España y la amnistía fiscal

Hervé Falciani, el exempleado de HSBC que sustrajo datos de clientes que acudían a Suiza para escapar al fisco en sus países, lamentó hoy las obstrucciones a la investigación de esas listas en España, así como la “amnistía” a los defraudadores.

“En España hay funcionarios que han sido apartados porque han querido investigar transacciones” sospechosas, señaló Falciani en una entrevista radiotelevisada por “RMC” y “BFM TV” en referencia a los obstáculos que han aparecido en diversos países para la explotación de sus listas.

En esa misma línea, se quejó de que para proteger a los defraudadores “han surgido leyes de amnistía un poco por todas partes, en España, en Italia, en otros sitios”.

Contó que en Francia, la que era ministra de Justicia cuando él huyó de Ginebra en 2008 con los ficheros, Michèle Alliot-Marie, había intentado que el fiscal del caso, Éric de Montgolfier, entregara los originales a Suiza, pero el representante del Ministerio Público se resistió.

Falciani, que trabajaba como informático en la filial suiza de HSBC, dijo que había conseguido los datos del banco británico -de los que han salido 106.000 nombres de tenedores de cuentas en las que había más de 180.000 millones de euros- gracias al apoyo de la CIA.

Las autoridades helvéticas, que lanzaron contra él una orden internacional de busca y captura, le acusan de haber robado esas informaciones y de haber intentado venderlas en Líbano.

“Es absolutamente falso”, aseguró hoy, antes de añadir que esa “tesis suiza” ha sido “desmentida por una autoridad judicial de envergadura, que es la Audiencia Nacional española”.

Interrogado sobre si está protegido actualmente por Francia y España, se limitó a responder que “las principales protecciones ahora para mí y para mi familia no son francesas”, un país donde algunos funcionarios que han intentado ayudarle han sido marginados.

Confirmó que está colaborando en España con Podemos, y aludió al caso Bankia sin dar más detalles.

Y mostró su esperanza en que gracias a la colaboración de “formaciones políticas de todos los colores, los ciudadanos van a saber”.

No obstante, en paralelo manifestó dudas por la falta de voluntad política y advirtió de que el fenómeno de evasión fiscal que ha descubierto el caso HSBC no se limita a ese banco, porque quedaron en evidencia 1,5 millones de transacciones de diferentes entidades en un año.

“Si se tira del hilo, habrá un nuevo maremoto”, comentó, antes de quejarse de que no se ponen medios para hacerlo.