Francia trabaja con la perspectiva de una lista europea de paraísos fiscales

Francia ha anunciado que elaborará una lista de paraísos fiscales, a la vista de la insuficiencia de lo realizado en la materia a escala internacional, pero trabaja con la perspectiva de que la lista se haga a escala europea, dentro de la lucha contra la evasión y el fraude de impuestos.

Fuentes oficiales francesas indicaron hoy que esa voluntad de una lista europea “se podría confirmar mañana” en la cumbre de la UE en Bruselas, que tiene la lucha contra la evasión fiscal como tema estrella, junto a la política energética.

“Empezamos con una lista francesa”, como había anunciado el presidente francés, François Hollande, pero “al mismo tiempo trabajamos con la perspectiva de una lista europea” porque “tendrá toda su fuerza a nivel europeo”, comentaron las fuentes.

La posición francesa parte de la constatación de que los avances en el G20 en 2009 sobre la identificación de paraísos fiscales fueron “formales” ya que las jurisdicciones dejaban de ser señaladas tras firmar determinados convenios de intercambio de información fiscal, pero sin que necesariamente hubiera cambios efectivos, y “eso mostró que la lista se había hecho inútil”.

Hollande también va mañana a Bruselas con la idea de que el intercambio de información “debe convertirse en regla a escala europea, y desarrollarse a escala mundial”, y debe cubrir todas las informaciones, es decir los ingresos pero también el patrimonio.

Coincide con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en llevar a cabo negociaciones con terceros países, como Suiza, mientras se trabaja en el seno de la UE, y en principio no ve razones para que las autoridades helvéticas acepten ese intercambio automático, puesto que ya lo han hecho con Estados Unidos.

En todo caso, si Suiza se negara, París apuesta por adoptar la nueva directiva sobre el ahorro en los 27 miembros de la Unión, y en caso de obstáculos entre éstos, por ejemplo por el hecho de que en Austria el secreto bancario sea un principio de la Constitución, por que el intercambio automático se haga dentro del grupo de países que ya se han adscrito, que son al menos 16.

“El mejor sistema sería el europeo, que ofrece garantías jurídicas”, pero si no es posible inmediatamente, se hará con los Estados del “grupo piloto”, comentaron las fuentes.

Insistieron en que ahora no se trata de conseguir una armonización de los tipos impositivos del impuesto de sociedades, pero sí de evitar que -como ocurre- algunas empresas aprovechen vacíos jurídicos para no pagar apenas impuestos.

Un punto derivado de éste es el de la economía digital, en la que en muchos casos las compañías escapan totalmente al impuesto al desvincular sus ingresos de los países de donde los extraen.

Para hacer frente a esa situación, París sostiene que “hay que encontrar una manera de territorializar esas actividades” de forma que tributen legítimamente, algo en lo que trabaja la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Van Rompuy quiere seguir profundizando en este asunto para que se aborde en la cumbre de la UE de octubre, en la que ése será un tema específico.

Sobre el llamamiento de Hollande del pasado jueves para crear una “Europa de la energía”, su intención en primer lugar es darle contenido, y ahí no descarta que se puedan modificar los tratados actuales “si para ser eficaces hacen falta medios jurídicos”, de acuerdo con sus servicios.