IU dice que su propuesta de salario máximo afecta al 1 por ciento de los asalariados

El candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha calculado hoy que su propuesta de prohibir que el trabajador que más gana en una empresa no supere en diez veces lo que percibe el peor pagado afectaría tan solo al uno por ciento de los asalariados españoles.

A su juicio, es necesario exigir a ese “uno por ciento más rico de la población que se haga cargo de gran parte de los costes de la crisis” económica, en un momento de “desigualdad extraordinaria” con “situaciones aberrantes”, como que el número dos del BBVA se jubilara con una pensión vitalicia de 9.400 euros al día, ha señalado.

Garzón, que ha explicado esta propuesta en la presentación del nuevo Estatuto del Trabajo que llevará en su programa electoral, ha asegurado que ese debate está “abierto en casi todos los países”, aunque ha reconocido que en ninguno se ha llevado a cabo.

Con el “salario máximo”, aunque relativo, que propugna IU solo el 1,6 % de la población cobraría por encima de los 90.000 euros.

El nuevo Estatuto del Trabajo que propone incluye subir el salario mínimo (648 euros) hasta los 1.176 euros en 2019, a razón de unos cien anuales, una propuesta “modesta”, pero “realista”, ha subrayado el candidato.

También aboga por la igualdad de duración de los permisos de maternidad y paternidad, por coberturas de desempleo no inferiores al 50 % y por el “control estricto” de las horas extraordinarias, además de no renunciar a reivindicaciones históricas como la jornada de 35 horas semanales y la supresión de las Empresas de Trabajo Temporal.

IU promete asimismo indemnizaciones por despido no inferiores a 45 días y que en las empresas con beneficios no pueda haber despidos colectivos.

Garzón ha insistido, no obstante, en que lo fundamental es cambiar el modelo productivo, no sólo derogar la reforma laboral, y en que su propuesta “estrella” es la creación de un millón de puestos de trabajo a través de un programa llamado Trabajo Garantizado, que costaría 15.000 millones de euros brutos entre salarios de 900 y 1.200 euros, para yacimientos de empleo como la rehabilitación de centros históricos.

La profesora de Derecho del Trabajo de la Universidad de Valencia y presidenta de la fundación de IU, Adoración Guamán, ha enumerado además otras promesas electorales, como recoger el derecho al trabajo digno en una nueva Constitución, lo que supone que el Estado debe poner “todos los medios para garantizarlo”.

Respecto a los tipos de contratos, IU ofrece que el contrato indefinido sea el pilar de la contratación y que las contrataciones temporales (de siete tipos) se rijan por la causalidad.

Sobre el futuro de las pensiones, el candidato de IU cree que se debería “abrir un dialogo amplio” y “repensar las vías de financiación” -por ejemplo vía impuestos-, convencido de que “lo que no puede hacerse es bajarlas porque no son viables”.

De momento, entre sus propuestas para las elecciones del 20 de diciembre figura subir las cotizaciones a la Seguridad Social, la revalorización de las pensiones mínimas el cien por cien en determinados casos y volver a vincularlas al IPC.

En total, las promesas laborales de IU costarían 55.000 millones de euros, que se sufragarían con los más de 60.000 millones que ingresarían gracias a un plan de emergencia social.