Ingenio e innovación de nuevas empresas egipcias desafían la crisis económica

A pesar de la inestabilidad política en Egipto desde la revolución de 2011, que ha espantado a los inversores y a las grandes compañías, en el país han nacido muchas y diversas empresas emergentes, que han triunfado gracias al ingenio ante la falta de dinero.

Este es el caso de “Recyclobekia”, que se presenta como la primera y única empresa de Egipto y del mundo árabe dedicada al reciclaje de residuos electrónicos, y que surgió de la idea de 20 estudiantes universitarios en 2011.

Uno de sus fundadores y actual director ejecutivo, Mustafa Hemdan, explica a Efe que el comienzo no fue fácil porque nadie tenía experiencia en este sector en Oriente Medio. Por ello, la idea enseguida llamó la atención y consiguió inversión, y se convirtió rápidamente en una empresa de éxito y muy competitiva.

Hemdan, que tenía tan solo 20 años cuando el proyecto empezó a andar, cuenta que, como muchos otros jóvenes de su generación, participó en la revuelta del 25 de enero, que -según él- tuvo un “gran impacto” en el “boom” de las denominadas startups.

“Queríamos hacer de Egipto un lugar mejor y (a día de hoy) todavía conservamos un poco de esperanza”, dice optimista el joven empresario, que asegura que aún no ha alcanzado sus metas, a pesar de que “Recyclobekia” ya opera a nivel internacional.

En ese caldo de cultivo creativo que siguió a la primavera árabe, también emergieron otros egipcios, diseñadores de ropa y joyas, que ahora empiezan a afianzarse como marcas en Oriente Medio e incluso más allá, como las creadoras de bolsos y complementos “Okhtein” (dos hermanas).

El Cairo se ha situado como una de las ciudades más prolíficas de la región y por ello en 2013 nació en la capital egipcia la feria de empresas emergentes de Oriente Medio y el norte de África “RiseUp”.

A la edición de este año, celebrada a mediados de diciembre, acudieron unos 1.200 emprendedores y 130 inversores para compartir ideas y experiencias, además de a escuchar a los gurús del sector locales e internacionales.

“Helm”, fue una de las empresas que estuvo presente este año para darse a conocer y recabar fondos con el objetivo de seguir creciendo y desarrollando su labor a favor de las personas discapacitadas, un colectivo olvidado en Egipto.

Su fundador, Ramez Maher, explica a Efe que “Helm” (Sueño, en árabe) trabaja con el Gobierno egipcio para mejorar la accesibilidad en los lugares públicos.

La empresa se encarga de hacer un estudio y de obtener la financiación a través de patrocinadores, ya que “esta no es una prioridad” de las autoridades, explica Maher.

Asimismo, “Helm” ha desarrollado una aplicación llamada “Entaleq” (¡Lánzate!), a través de la cual se pueden consultar qué lugares públicos y establecimientos privados no tienen barreras para los discapacitados.

De momento, sólo tienen registrados 300 en la megalópolis de El Cairo, pero el objetivo es catalogar muchos más y llegar a otros puntos del país, cuenta Maher, quien destaca que esto “es útil no sólo para los discapacitados, sino para toda la sociedad, por ejemplo, los mayores o las madres con niños pequeños”.

“Helm” es un ejemplo de las empresas innovadoras que se han inspirado en los problemas y realidades de El Cairo, y ofrecen desde servicios funerarios online a la entrega a domicilio de cualquier producto, o una aplicación para avisar de los atascos en esta congestionada metrópoli de más de 20 millones de habitantes.

Muchas de ellas han sido “incubadas” por entes o programas especializados en desarrollar ideas innovadoras y brillantes, y convertirlas en una realidad, además de buscar financiación, como “Flat6Labs”, que opera en todo Oriente Medio y tiene una de sus bases en la capital egipcia desde 2011.

Todas las “startups”, muchas basadas en las nuevas tecnologías, tienen en común que no necesitan de un gran capital y han encontrado su nicho de mercado en medio de la grave crisis económica que sufre Egipto, que aún así parece un terreno fértil para estas empresas emergentes.