Repsol actualizará su plan estratégico en el primer semestre del año

Repsol actualizará en la primera mitad del año su plan estratégico para el quinquenio 2016-2020, según ha anunciado hoy su consejero delegado, Josu Jon Imaz, que ha dicho que la revisión se centrará en conseguir que se genere valor “en un entorno complejo y cambiante”.

Imaz ha hecho este anuncio durante la junta de accionistas que la petrolera ha celebrado hoy en Madrid y en la que ha avanzado la actualización del plan estratégico que hizo la compañía para adaptarse a la dimensión que adquirió tras la compra de la compañía canadiense Talisman por 10.400 millones de euros.

Imaz ha explicado que el plan hará una clara apuesta por la tecnología, ya que, por ejemplo, es lo que ha permitido a la compañía lograr un hallazgo como el que ha llevado a cabo este año en Alaska con su socio Armstrong Energy, que es de unos 1.200 millones de barriles recuperables de crudo ligero y que ha sido el mayor descubrimiento en los últimos 30 años en Estados Unidos.

Imaz, que ha señalado que sólo “las compañías ágiles y competitivas y con costes controlados” van a ser las que van a continuar en el nuevo entorno marcado por retos como el del cambio climático, ha explicado que en el plan estratégico habrá un “claro impulso a la digitalización”.

El consejero delegado de Repsol ha indicado que en la actualización del plan se perseguirá un mayor éxito en la exploración de recursos y que la corporación tenga unos costes menores y una mayor eficacia.

Además, ha señalado que otra de las líneas de plan es la mejora del margen por barril producido y procesado, así como el crecimiento en competitividad.

Imaz ha señalado que Repsol seguirá en los próximos años centrada en sus negocios estratégicos, continuará creciendo en rentabilidad y tendrá una producción de 700.000 barriles de petróleo diarios, además de una capacidad para procesar un millón de barriles equivalentes de petróleo al día.

Ha destacado que el ahorro que ha conseguido la compañía, gracias a las sinergias que ha incorporado, especialmente tras la compra de Talisman, y las mejoras en la eficiencia, superiores a las esperadas y que alcanzaron los 1.600 millones de euros en 2016, ha llevado a anticipar a 2017 el objetivo de que 2.100 millones de euros que se había fijado para un año después.

Por su parte, el presidente de Repsol, Antonio Brufau, se ha referido en su intervención en la junta a los retos que supone para la compañía la transición energética, así como la limitación del uso de los combustibles fósiles para evitar el calentamiento en exceso de la temperatura del planeta.

No obstante, ha augurado que el petróleo y el gas continuarán siendo la parte más importante como fuente de energía primaria y ha indicado que el gas va a ser la energía de la transición.

Brufau, que se ha mostrado a favor de que se ponga precio a las emisiones generadas por la utilización del carbón, ha reclamado también ayudas para la renovación del parque de automóviles de motor diesel antiguos, que son los que más contaminan.

Ha recordado que Repsol ha invertido 500 millones en los últimos años en proyectos de reducción de emisiones contaminantes que evitarán la generación de 43 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) en los próximos diez años.

Por otra parte, ha vaticinado que en 2017 el mercado del petróleo estará en equilibrio y se podría ver una estabilidad de precios al alza, que puede ser este año de 57 dólares el barril de media y que podría llegar a 65 dólares el barril en 2018.