Almeida aboga por ir abriendo el ocio nocturno “en la medida de lo posible”

Madrid, 14 jun (EFE).- El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, es partidario de “ir abriendo el ocio nocturno”, siempre “en la medida de lo posible” y siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias, al ser “posiblemente” el sector económico “más castigado” por la pandemia en la ciudad.

En declaraciones a los medios en la presentación de los Veranos de la Villa, Almeida ha argumentado que no sólo se trata de uno de los sectores que más ha sufrido los efectos de la pandemia, sino que además espera que con su reapertura disminuyan los botellones y la normativa “se cumpla un poco mejor” por parte de los jóvenes.

Representantes de la Consejería de Sanidad y del ocio nocturno se reúnen este lunes para estudiar los protocolos y criterios de reapertura del sector, con la intención de volver a la actividad la semana del 21 de junio si se mantiene la tendencia a la baja en los contagios.

En la Comunidad de Madrid, las discotecas y bares de copas fueron obligados a cerrar a finales de agosto de 2020 a consecuencia del coronavirus, aunque tuvieron la opción de reabrir desde octubre reconvertidos en bares y restaurantes, por lo que ahora pueden estar abiertos hasta la una de la madrugada con esta funcionalidad.

La propuesta de la asociación Noche Madrid es una “desescalada progresiva” que se haría en tres fases, comenzando el 21 junio abriendo “hasta las tres de la mañana, es decir, dos horas más allá de la hostelería (que ahora cierra a la una); con pistas de baile al aire libre; y recuperando el servicio en barra, aunque no el consumo sino la recogida de bebidas”.

En la primera fase el sector también está dispuesto a implantar medidos de CO2 para garantizar la calidad del aire, así como mantener la distancia de metro y medio en los aforos.

En la segunda fase, en julio, se podría implantar medidas tecnológicas de control de acceso mediante códigos QR para el eventual rastreo de personas en caso de un positivo, que serían de carácter voluntario.

En la tercera fase, en agosto, cuando el 70 por ciento de la población esté previsiblemente vacunada, el sector aspira a “la normalidad total, al cien por cien de la actividad. EFE

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