Chile pide a EE.UU. y a China actuar “con responsabilidad” en el comercio mutuo

El Gobierno de Chile llamó hoy a Estados Unidos y China a actuar “con responsabilidad” frente a las consecuencias que una guerra comercial entre ambos podría acarrear para otros mercados.

“Con todo respeto hacemos un llamado a la responsabilidad a las principales potencias del mundo porque esto no sólo los está afectando a ellos”, dijo el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, a horas de que entre en vigor la aplicación de un arancel por 34.000 millones de dólares a 800 productos chinos en Estados Unidos.

“Entendemos que hay problemas, he conversado este tema personalmente con el secretario del Tesoro norteamericano, Steven Mnuchin, que estuvo acá de visita y nos reunimos con él y con el presidente Piñera”, dijo Larraín en una rueda de prensa.

“Él nos decía que lo que quería era abrir mercado, pero hay que considerar que las medidas de tarifas y la protección a la industria local traen consecuencias porque traen represalias por parte de los socios comerciales y eso afecta a terceros”, añadió.

El jefe de las finanzas públicas de Chile indicó además que su país tiene maneras de hacer frente a la eventual guerra comercial, la primera “preocuparnos que nuestra economía crezca a través de medidas pro crecimiento y pro inversión, la recuperación de la confianza que estamos haciendo y mirar que la inversión está comenzando a despegar”, dijo.

“Nos da gusto que (Chile) lo esté haciendo después de cuatro años de caída”, acotó, y señaló que la segunda vía frente a una guerra comercial es “una responsabilidad fiscal de tiempos complejos, tener nuestras cuentas fiscales ordenadas”.

Para Chile, una de las peores consecuencias es una caída en el precio del cobre, su principal producto de exportación, que hoy completó nueve jornadas a la baja y cerró en 2,902 dólares por libra.

Felipe Larraín comentó al respecto que “afortunadamente la política fiscal chilena se maneja con precios del cobre de largo plazo, eso es el elemento determinante”.

“Nuestro compromiso fiscal no se hace con el precio del día o de la semana, sino que con el de largo plazo. En ese sentido, esto tiene mucha menos incidencia sobre el precio de largo plazo”, insistió.

Agregó que “no hay que sobrerreaccionar a los avatares del mercado de corto plazo, sino más bien mirar tendencias de largo plazo”.

“Creo que éstas no van hacia una caída adicional del precio del cobre”, afirmó Larraín.

A su juicio, la chilena “es una economía que por distintas razones está mejor preparada que otras” y está “relativamente bien preparado”.

Sin embargo, a renglón seguido matizó que el país suramericano no es “inmune a lo que ocurra en el mundo” y que “no conviene, ni a Chile ni a nadie, una guerra comercial”.