Las fincas rústicas caen un 7% en los últimos cinco años frente a los pisos que se deprecian más del 30%

En concreto, la vivienda alcanzó su punto álgido en el segundo semestre de 2007, empezando a caer a partir de ese momento y las fincas rústicas, sin embargo, siguieron aumentando su precio hasta inicios de 2010.

“La caída de las fincas rústicas es menor, ya que la subida lo fue también, al estar expuestas a una menor especulación”, señala el informe, que señala que se trata de bienes de inmensa heterogeneidad con precios que oscilan desde los 2.500 euros por hectárea en terrenos de secano en Aragón a los 300.000 euros por hectárea de cultivos bajo plástico en Andalucía.

Así, el precio de las fincas ha descendido por ahora hasta cifras del primer semestre del año 2008 y aunque, resistiendo, está afectado también por la crisis económica y sus efectos, como las dificultades de acceso al crédito, las incertidumbres sobre decisiones pendientes al respecto de la Política Agrícola Común (PAC) y el descenso de precios en origen pagados a agricultores y ganaderos.

En concreto, Andalucía ofrece olivar desde 12.000 euros por hectárea en secano hasta los 48.000 euros en regadío, pastos arbolados entre 3000 y 9.000 euros o cultivos hortícolas de invernadero (bajo plástico) entre 150.000 y 300.000 euros.

En Castilla-La Mancha con la superficie más grande de viñedo de España existen precios en secano desde 9.000 euros por hectárea hasta los 24.000 euros en regadío. En olivar, desde 6.000 euros en secano a 20.000 euros en regadío y cultivo de cereal entre 3.500 euros en secano y 13.500 euros en regadío.

Por su parte, Castilla y León cuenta con una diversidad enorme, que destaca en viñedo con los precios de Toro entre 6.000 y 20.000 euros; en Rueda entre 20.000 y 60.000 euros y en Ribera del Duero entre 40.000 y 60.000 euros por hectárea.