La inversión hotelera en España se redujo a la mitad en 2012

La inversión hotelera en España se situó en 419,4 millones de euros en 2012, prácticamente la mitad que en 2011, por la restricción del crédito, las dudas sobre la economía española y el diferencial entre las expectativas de vendedores y compradores, según un informe de la consultora irea presentado hoy.

En 2012 se cerró la venta de 32 hoteles, frente a los 36 de 2011, lo que indica una reducción significativa del precio medio.

El volumen de inversión, el más bajo de los últimos diez años, se sitúa así en niveles similares a los de los años previos a la entrada del euro, ha destacado el director del área de hoteles de irea, Miguel Vázquez, en la presentación.

Las operaciones “distress” (aquellas en las que la motivación del vendedor tiene que ver con una situación de estress financiero o aquellas en las que se venden activos adjudicados por la banca) aumentaron en 2012 hasta alcanzar el 60 % del volumen total de la inversión, lo que, según el informe, es reflejo de la prolongada situación de crisis financiera.

En 2013, se mantendrá el protagonismo de estas operaciones, según la consultora, para la que la inexistencia de un mercado de financiación activo seguirá condicionando la actividad inversora.

El año pasado, continúa el informe, no se registraron transacciones de “activos singulares”, que en 2011 concentraron el 35 % de la inversión total, al tiempo que es destacable la reducida contribución del segmento 5 estrellas.

Los inversores apostaron, así, por el segmento cuatro estrellas, que concentró el 70 % del total del volumen transaccional.

El segmento vacacional registró más de dos tercios del volumen total de transacciones, mientras que en el sector urbano hotelero, una tipología que en años precedentes se había consolidado como activo refugio, se produjo una notable paralización de las decisiones de compra.

Hubo dos operaciones de cartera que representaron en torno a un tercio del total invertido: la adquisición de cinco hoteles vacacionales por parte de un consorcio liderado por Iberostar a Thomas Cook y la adquisición de los hoteles Orleans y Orleans Garden por parte de JS Hotels.

Por distribución geográfica, en 2012 hubo una mayor concentración que en 2011 y el destino más activo fueron las Islas Baleares, que, junto a Cádiz, concentraron un 57 % de la inversión.

Por perfil del inversor, las cadenas incrementaron su protagonismo y acapararon el 49 % de la inversión, y destaca la significativa caída experimentada por los inversores extranjeros, lo que se explica, según irea, por las incertidumbres vividas alrededor de un posible escenario de intervención de la economía española.

De cara a 2013, irea prevé que se mantendrá el protagonismo, como compradores, de grupos hoteleros locales, poco endeudados, especialistas en la gestión de hoteles en zonas concretas, con buenos nexos de unión con entidades financieras y que serán los compradores naturales de activos sobre-endeudados.

No obstante, según los expertos de la consultora, España seguirá siendo visualizada como mercado de oportunidad y tanto fondos como inversores foráneos reforzarán el “modo vigilancia” del mercado español para aprovechar posibles oportunidades de compra.

Según irea, la entrada en escena de la Sareb tendrá un impacto muy limitado sobre la actividad inversora, ya que las posibilidades de puesta en valor de los activos que va a recibir -adjudicados por las entidades financieras intervenidas y las que puedan ser objeto de nacionalización durante 2013- “son extremadamente limitadas”.