El Nikkei pierde un 0,68 % ante los planes para declarar el estado de emergencia

Tokio, 4 ene (EFE).- La Bolsa de Tokio terminó su primera jornada del año con una bajada del 0,68 % en su principal indicador, el Nikkei, ante los planes del Ejecutivo nipón de volver a declarar el estado de emergencia sanitaria por el continuado aumento de casos de covid-19.

El Nikkei cedió 185,79 puntos y terminó la jornada en 27.258,38 enteros, mientras que el índice más amplio Topix, que incluye a los valores con mayor capitalización, los de la primera sección, perdió 10,09 puntos o un 0,56 %, hasta los 1.794,59 enteros.

El índice referencial comenzó así 2021 borrando parte de las ganancias con las que terminó el año, en el que cerró con su nivel más alto desde 1989.

El parqué tokiota reaccionó de este modo al anuncio realizado este lunes por el primer ministro nipón, Yoshihide Suga, en el que confirmó que el Gobierno contempla declarar el estado de emergencia en la región de Tokio y las prefecturas colindantes, que están entre las más afectadas por el repunte de casos de coronavirus.

Esta medida excepcional, que ya estuvo en vigor durante la pasada primavera, se aplicaría a finales de esta semana y contemplaría nuevas limitaciones en los horarios de apertura para establecimientos comerciales considerados no esenciales, entre otras restricciones, aunque no conllevaría un confinamiento de la población.

Entre los valores con mayor capitalización, el gigante tecnológico Softbank retrocedió un 0,59 %, y el líder nipón del automotriz, Toyota Motor, bajó un 0,62 %.

La compañía de videojuegos Nintendo perdió un 0,45 %, y la multinacional textil Fast Retailing, propietaria de la cadena de tiendas de ropa Uniqlo, lo hizo un 1,51 %.

En cambio, el conglomerado tecnológico y audiovisual Sony fue uno de los mayores ganadores de la jornada, con un avance del 1,21 %.

Los sectores que acumularon mayores pérdidas fueron los del transporte aéreo, el inmobiliario y el de la minería.

De la primera sección, 1.629 valores retrocedieron, 495 avanzaron y 63 terminaron sin cambios.

El volumen de negociación ascendió a 1,94 billones de yenes (15.360 millones de euros).