Telefónica se centrará en nuevos tipos de negocio para intentar mejorar la rentabilidad
En la pista central del Madrid Open, en la Caja Mágica, el presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete, ha reunido a 900 directivos de la compañía para trazar las líneas estratégicas del grupo para los próximos años. Con una escenografía similar a la de una gran tecnológica, el presidente de la teleco ha apuntado que pese a que la empresa es “más fuerte” que hace cinco años, “esto no es suficiente”.
Pallete ha reconocido que la situación bursátil de la compañía no es la mejor, con dudas de los inversores sobre el futuro del sector, la importante deuda de la compañía o que “nos consideran todavía muy complejos”. “Nos piden una mejora de la rentabilidad”, ha subrayado.
Para ello, el presidente de la mayor teleco de España ha apuntado a negocios “que hoy son un poco más pequeños” para mejorar los ingresos y la rentabilidad de la compañía. “Tenemos capacidad para capturar ese crecimiento”, ha remarcado durante su discurso.
En este sentido, ha apuntado a la televisión de pago, donde la compañía ha realizado importantes inversiones en derechos deportivos o alianzas con gigantes como Netflix. Igualmente, también señala otros negocios como el big data, las herramientas en la nube o el internet de las cosas. “Los próximos tres años serán cruciales para la compañía”, ha defendido el directivo.
“No podemos tener duda sobre la capacidad de lograr rentabilidad con estos negocios”, ha defendido Pallete. Así, la conectividad, con la futura llegada del 5G y servicios ligados a esta serán el foco de la compañía. El directivo ha destacado que “por primera vez” el negocio de voz supone “menos de la mitad de nuestros ingresos”.
El presidente del antiguo monopolio estatal ha aprovechado su discurso también para cargar contra el marco regulatorio. “Nuestra regulación es del antiguo régimen”, ha asegurado. En concreto, ha criticado que se les considere una utilitie –servicios básicos como la electricidad, sujetos a ciertas regulaciones especiales– pero que además haya una presión para bajar precios “cuando en otros negocios como la energía no dejan de subir”.